OneShots | Finn Wolfhard.

12; siempre me quedaré a tu lado.

Título: Siempre me quedaré a tu lado.

Pareja: Finn & Maddie.
(Pedido)

Advertencia: No

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-¿Dónde está Once?- pregunté entre gritos.

-¡Mike estás delirando, tienes fiebre!- una enfermera tocaba mi frente mientras otros intentaba calmarme.

-¡No tengo fiebre! ¿Dónde está Once?

La última vez que los vi a todos fue antes de golpearme en la cabeza en aquel acantilado, después de eso todo se volvió negro.
Once no estaba, Will había vuelto a desaparecer, no podía ver a Dustin y su pudín por ningún lado y Max y Lucas no estaban por ningún lado besuqueándose.

Estaba en el hospital y ninguno de mis amigos estaba conmigo, ni si quiera Once.

Me encontraba sin fuerza apenas, notaba que mis brazos estaban destrozados al igual que mis piernas, sentía que no tenía músculos.

-No hagas esfuerzos- la enfermera me tapó con una de aquellas sábanas blancas.

Mi mente estaba confusa.

-¿Cuánto...?-suspiré sin fuerza.

-Mucho tiempo Mike, llevas aquí mucho tiempo- uno de los enfermeros conectó mi brazo a un gotero con una aguja- pero ya has vuelto chico, eres muy valiente.

Yo sonreí, no sabía que decir.

-¿Dónde está Once?

-No hay ninguna Once- dijo la enfermera que estaba acomodando mis mantas.

-¿Will?

Volvió a negar.

¿Dónde estaban mis amigos?
¿Cuánto tiempo llevaba en aquel hospital?

-Duerme un poco- el chico me sonrió gratamente- se te encuentras mal, pulsa este botón- me entregó un pequeño mando con un botón rojo.

Yo asentí.

Los médicos abandonaron la habitación.

Hacía un lar de horas había despertado con casi una decena de médicos mirándome fijamente, la luz molestaba en mis ojos, escuchaba gritos «Ha despertado» mucha gente que no conocía me abrazaron y lloraban a mi lado, incluyendo mis padres y Nancy. Yo estaba confundido, parecía que me había pasado siglos durmiendo y Once no estaba por ningún lado.

Cerré los ojos suspirando débilmente y me dormí. Sentía mi cuerpo tan saturado que las garras de Morfeo me llevaron solo en cuestión de segundos al mundo de los sueños.

•••

Me desperté de una pesadilla en mitad de la madrugada. Las imagines de yo golpeándome en el acantilado junto a mis amigos no paraban de repetirse. ¿Y si en el trayecto que me traían en el hospital les había ocurrido algo y por eso no me habían venido a ver despertar? Supuse que solo me había llevado unos dos días en coma, tiempo suficiente para que les ocurriese una tragedia. Estaba preocupado.

Jadeaba pesado mientras mi cuerpo sudaba, tiré las sábanas al suelo e intenté sentarme, pero no pude, no tenía fuerzas para levantarme de la cama.

Encendí la luz en el interruptor sobre mi cabeza La camilla que estaba a mi lado en mi habitación había estado toda la tarde vacía, pero había alguien, una chica.

Se escuchaba como la chica sollozaba. No llevaba puesto el pijama del hospital, por lo que supuse que no era ninguna enferma.

-¿Ce?