2: Terapeuta.

4.7K 570 108
                                    

Y Hoseok lo confirmó, TaeHyung llegó y lo dejó con las ganas. Diciendo la típica frase que decía después de llegar del trabajo.

“Estoy cansado.”

Maldición, el también estaba cansado. Pero el quería tener ese momento sólo para los dos. Bufó, doblando las camisas de TaeHyung con cuidado. Tratando de que no quedará ninguna marca, al finalizar tan sólo las guardó en el armario compartido. Observó el reloj en su mesita de noche; 00:17 PM. Mhm, era demasiado tarde, quizás TaeHyung no llegaría ese día.

Río, recordaba lo que sucedió cuando tan solo llevaban cinco meses juntos y TaeHyung no había llegado en toda la noche. Le había llamado, dejado más de cincuenta mensajes, en todas las redes sociales que podía. Pero TaeHyung no se comunicó hasta el día siguiente, estaba llorando a mares, preocupado por si le había sucedido algo, o lo peor que pensó fue que TaeHyung le estuviera engañando. Pero TaeHyung sólo se había quedado hasta tarde ese día trabajando, y debido a que cerca del trabajo había un hotel barato, prefirió quedarse allí, ya que al otro día debía trabajar.

Suspiró, lanzándose a la cama, mientras tomaba su teléfono. Abrió el Kakao, contacto Jimin específicamente. Observó el número y la dirección, pensando si realmente debería llamar o preguntarle a TaeHyung primero, aún que ya sabía la respuesta.

Agh, no puedo. Estoy demasiado ocupado con el trabajo, además, no tenemos ningún problema.”

Y luego de eso, lo más probable es que Hoseok le refutaria y luego empezaría una discusión en la que TaeHyung terminaría por irse de la casa furioso. Pero también sabía que si pedía una cita por sí mismo, tan sólo TaeHyung se negaría y le diría que fuera solo. Gimoteo sin saber que hacer, lanzando su teléfono a un lado. Sus pequeños ojos almendrados empezaron a cerrarse, por lo que bostezó, antes de acomodarse en la cama sin ganas de cubrirse con algo para no pasar frío.

Deberían de haber sido pasada la medianoche, cuando sintió como era cubrido por una manta y un beso húmedo de TaeHyung en su mejilla. A la vez que captaba su característico perfume, combinado con otro más, que le era muy conocido. Se revolvió en la cama, demasiado cansado como para importarle porque TaeHyung había llegado a esa hora. Lo único que escuchó antes de dormirse fue la llave de la ducha.

Eran las siete de la mañana, cuando TaeHyung ya estaba listo y perfumado, estaba arreglando las mangas de su traje cuando Hoseok despertó. Un poco adormilado se sentó en la cama, levemente desorientado. Miró a TaeHyung con un ojo abierto y otro cerrado, sus puntiaguda nariz sintiendo la habitación envuelta en el perfume ajeno. TaeHyung le miró a través del espejo, dándole una sonrisa con labios cellados.

— Hey, bebé—. TaeHyung dió medía vuelta, acercándose hacía Hoseok para darle un pequeño beso. Devolviéndose para buscar un pequeño Rolex que guardaba en uno de sus cajones.

— Buenos días, amor—. Murmuró, aguantando las ganas de bostezar. — ¡Oh, verdad! TaeHyung, tengo que decirte algo—. Arregló un poco su cabello, que imaginaba que debía de estar hecho un desastre.

— ¿Qué es? Dímelo rápido, que si me demoro un poco más llegaré tarde—. TaeHyung acomodó su corbata, sin mirarle. Hoseok estuvo a punto de soltar una grosería debido a lo brusco que le había hablado.

— Pero necesito que me mires—. Mordió su lengua, tratando de que aquella frase sonara amable. TaeHyung tan sólo bufó, dándose medía vuelta y sentándose frente a él en la cama matrimonial—. Pienso que deberíamos ir a un Terapeuta—. Lo pensó un poco más, no sabiendo si terminar la frase o no, optando por decirle de inmediato, luego de todas formas se enteraría—. Sexual.

TaeHyung le miró por unos segundos, no tenía ninguna expresión en su rostro, tan sólo le miraba como si le estuviera inpeccionando.

— Está bien—. Fue todo lo que dijo, antes de levantarse, yendo a buscar su maletín a la pequeña silla que se encontraba en un rincón. Hoseok quedó con la boca abierta, no sabiendo que decir en ese momento—. Bien, nos vemos. Adiós, te amo.

— Adiós... — Hoseok murmuró, dándose cuenta que TaeHyung ya no estaba en el cuarto. Sus ojos brillaron emocionados dándose cuenta de la situación—. ¡Bien, entonces pediré hora, Tae! — Le gritó a su esposo, antes de escuchar la puerta ser cerrada, sin haber recibido una respuesta. Se lanzó nuevamente hacia la cama, con una sonrisa radiante. Sentía que las cosas iban a mejor de ahora en adelante, realmente lo creía.

O eso tenía esperado hasta que ese día, TaeHyung no llegó.








Estaba jodido y cansado, lo esperó toda la noche, parecía que cada día el menor pasaba menos tiempo en la casa junto a él. Estaba completamente decidido, pediría la hora y asistirían a ver al terapeuta.

Tomó el celular con furia, estaba bastante enojado y se le notaba, marco el número que había guardado la noche anterior y no espero más para marcar el contacto con el ceño fruncido y los labios comprimidos en una mueca "ㅅ" que hacía normalmente cuando estaba enojado o serio.

— ¿A-aló?—. Habló nervioso, siempre se ponía de esa forma cuando tenía que hablar por teléfono, realmente no le gustaba. Pero era necesario. Carraspeó, tratando de que su voz no sonara rota.

— Hola, buenas. Hablas con el departamento Jongiliyeo ¿En qué le puedo ayudar? —. La armoniosa voz de una chica sonó, por lo que Hoseok se sintió un poco más tranquilo.

— Mhm, buenas, quería pedir una hora con el terapeuta... — Dudó si debía decirle que era sexual o no, por que tampoco sabía que ofrecían allí o si era demasiado obvio que iba a ser un terapeuta sexual.

— Oh, ¿Un terapeuta? ¿De qué tipo de terapeuta quiere? — Hoseok se preguntó que quiso decir con qué tipo de terapeuta. Pero tan sólo soltó un incómodo; Sexual—. Oh, bien. ¿Algún terapeuta en especial?

Hoseok observó el anillo en su dedo izquierdo, jugueteando con el unos segundos.

— Umh, no, sólo el que sea más eficaz, por favor.

Hai finito le parti pubblicate.

⏰ Ultimo aggiornamento: Feb 17, 2019 ⏰

Aggiungi questa storia alla tua Biblioteca per ricevere una notifica quando verrà pubblicata la prossima parte!

terapia sexual, yoonseokDove le storie prendono vita. Scoprilo ora