Parte IV

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Stan mientras que esta estacionando su auto ve llegar a lo lejos una patrulla, no sabe qué hacer la patrulla viene directo a el los nervios lo están matando no sabe qué le va a decir al oficial sólo tiene tiempo para bajarse del carro y caminar hasta su puerta actuando normal, tenía que quitarse la camisa ya que esta tenía manchas por todos lados, los zapatos los paso por un charco que estaba cerca para borrar las gotas de sangre que habían en ellos, después se logró calmar un poco ya no había muchas cosas que lo delataran ante el policía. Stan sigue hasta la puerta y saca las llaves para abrirla de repente se escucha un pequeño llamado de atención "Sr Stanley, por favor acérquese a la patrulla con las manos bien en alto" Stan se alarma y pues se da la vuelta tal y como se lo indican, era una oficial muy alta y corpulenta y con una voz de mando que era imposible no prestarle atención y a su lado un pequeño compañero como de la estatura de Stan o quizás menos era una pareja ironica y muy graciosa para Stan pero evita los gestos que se puedan tomar como ofensas. Ya al llegar a la patrulla la oficial dice
*Sr Stanley le pido que nos invite a pasar a su casa tenemos mucho que hablar* Stan se encontraba molesto para que lo hizo caminar en lugar de acercarse a la puerta y hacer todo este drama pero no le queda otra que aceptar y dirigirse a la puerta abrirla y invitar a los oficiales a pasar con gestos que demostraban su ironía, ya en la sala de estar Stan pregunta
–¿Que les trae por aquí señor y señorita oficial?*
*Más respeto sr (dice el oficial enano) primero que todo yo soy el Oficial Pérez y mi compañera es "Máquina" le gusta que la llamen así en donde quiera que esté así que esperamos que usted lo haga igual*
Stan moría de la risa pero no puede demostrarlo tiene que mantener una cara sería y prosigue *Está bien no tengo problema en como llamarlos, pero estoy muy cansado vengo de hacer ejercicio y pues no tengo muchos ánimos hoy de hablar me pueden decir ¿Que los trae a mi casa?*
– Máquina le contesta "Su vecino, se perdió esta tarde y dicen que la última vez que alguien lo vio fue al frente de su casa ayudándolo a bajar un cartel de su posada"–
*No sé si están seguros de eso saben el si me ayudó y estuvimos mucho rato hablando y después me comentó sobre un asesino que atacaba en el parque cosa que me aterró y decidí ir a un gimnasio y ya no ir al parque* Stan trata de relajarse sabía que si se equivocaba en lo más mínimo sospecharian aún más de el, así que debía guardar la calma.
–Sr Stanley su historia creo que tiene una parte oculta que no nos quiere contar (dijo Pérez)–
*Porque tendría algo que ocultar, les estoy afirmando que el me ayudó hablamos un rato y siguió su camino*
–Igual es usted un sospechoso que no hay que descartar (dice Pérez con una sonrisa burlona en su cara) sabe su familia no tiene un historial muy bueno para descartar su figura del caso–
Stan se molesta mucho y responde *Si me disculpa usted no es quién para hablar de mi familia si usted me exige respeto para usted y su compañera lo mismo exijo cuando se hable de mi familia*
–Como diga Stanley (contesta Máquina) pero igual lo estaremos vigilando muy de cerca–
*Entonces los estaré esperando señores, les pido si ya terminaron que se retiren quiero descansar y aunque sé que estarán vigilando no lo hagan cuando duermo pues duermo desnudo y no quiero que usted Máquina me vea así* Stan suelta una carcajada de verdad que no sabía cómo decirle a los oficiales que se marcharán de una manera educada, ya que no estaba muy contento con sus comentarios.
–Entonces bien tampoco lo queremos ver en esas fachas, así que nos marchamos y tenga mucho cuidado en la calle Stanley hay muchos locos afuera en las calles esperando para atacar– Máquina estaba molesta por el comentario anterior de Stan y lo único que quería era patearlo hasta que no le quedará aliento.
*Está la puerta abierta, hasta luego*
Los oficiales se marchan y Stan ya respira tranquilo y piensa "Hace falta algo que me inspire y que me permita hacer mi último ataque para ya desaparecer por un tiempo y quedar como la mayor pesadilla de todos durante muchos años"

Stanley Donde viven las historias. Descúbrelo ahora