P.Z

P.Z [I]

--¡Noonaaaa! --El único chico del grupo exclamaba empujando a la mayor de todas las personas que habían sobre el bus.

En aquel bus que conducía a la nada había un grupo de nueve amigos que variaban en la edad desde 12 a 20 años, en su mayoría chicas. No estaban solos, puesto que el viejo conductor, una anciana que aparentaba unos 70 y tantos de edad y un adolescente dormido viajaban en el mismo bus. No ocupaban gran parte del espacio, sin embargo eran un tanto ruidosos, destacando al único chico del grupo y sus discusiones con la mayor de todas. Pero este se empeñaba en que tenía un motivo, y lo llamaba:

--¡Dame mi móvil!

Una de las menores del grupo se movió en su asiento y al abrir los ojos, enfocó su vista en las dos personas que discutían. La habían despertado, y el único chico no tardó en darse cuenta el error que habían cometido.

--¿Pueden dejar de discutir un momento? --Masculló la menor, mirando mal a ambos. Si bien los adoraba, no era de su agrado que la despierten de su profundo sueño.

--¿Qué día es hoy? --Preguntó otra de las chicas, asomándose por su asiento y acomodando sus lentes.

El viaje estaba siendo condenadamente largo, entre las discusiones, preguntas estúpidas y aburrimiento, aquellas nueve horas se les harían infinitas. Sobretodo a Queen, quien apenas entendía lo que sucedía y era una de las más ignoradas del grupo (por no decir, la más ignorada); su único consuelo era su compañera de asiento, Martina, pero esta estaba muy entretenida filmando lo ocurrido para subirlo luego a YouTube como un vídeo blog.

--Uh, Alex, estás insoportable hoy. --Comentó una de las chicas, Florencia, quien hablaba por dm con el ídolo en común que compartían los nueve.

Claramente no lo hizo con intención de ofender, sino como chiste; y Alex pensaba devolvérsela.

--Bájate del bus loca.

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Al llegar a la no demasiado grande casa que alquilaron en aquel descansado, fueron bajando de a uno y la mayor de todas se paró contándolos como si fuesen patitos.

--Alex --el nombrado levantó la mano--, Marti --imitó el acto del anterior y prosiguió así con los nombres--, Flor, Florchu, Sofi, Luna, Sam, Queen. --Contó a todos con las dedos y sonrió, antes de sacar una caja donde el móvil de la mayor permanecía.

Todos en el grupo se miraron entre ellos y Alex fue de los primeros en abrazarse a su celular fuertemente.

--Pongan los celular acá. Cero internet durante estos días. --Anunció la mayor, estirando la caja y viendo cómo poco a poco todos metían sus celulares. Excepto el chico de 15 años, que permanecía aferrado a su celular como si este fuese su vida entera.

Finalmente y con muchísimo esfuerzo, la mayor consiguió quitarle el móvil al menor y guardarlo en la caja, para luego ser la primera en ingresar en esta y esconderla donde ninguno pudiese encontrarla.

--Noona, Alex y Marti están bardeándose de nuevo. --Comentó Florchu, asomándose por la puerta donde estaba Noona.

La mayor de todas negó con la cabeza y sonrió, iban a ser unas vacaciones entretenidas.

Quizás, lo serían más de la cuenta...

Llegó uno de los momentos más difíciles, separación de habitaciones. Eran nueve personas en una casa con tres habitaciones, dos baños, una cocina y bastante vieja.

--Entonces... --Comenzó la más grande de la casa, tomando una lista con nombres para anotar quiénes compartirían habitación. --Alex, Marti y Sofi en la habitación de aquí abajo.

Alex, quien se estaba peleando con Marti (de nuevo) se volteó a ver a la mayor y levantó el dedo pulgar indicándole que todo estaba bien, mientras Sofi escribía (con un plumón negro que llevaba en la mochila y al entrar sacó) en la pared "Macri Gato", prestando poca atención a lo que ocurría.

--Luego, en la primer habitación de arriba, dormirán Luna, Sam y Queen. --Anotó esos nombres y observó cómo las tres nombradas chocaban los cinco entre ellas.

--¡Lex, soltame! --Chilló Marti y Noona se volteó a verlos, Alex había tomado de los brazos a Marti y esta luchaba por soltarse, todo mientras se morían de la risa.

--Para finalizar, Flor, Florchu y yo dormiremos en la última habitación de arriba.

--Piola. Tenemos baño propio. --Comentó Flor, asintiendo con la cabeza.

Bien, las habitaciones ya estaban asignadas, ahora venía lo más tranquilo... desempacar y pasar sus vacaciones en aquella vieja pero estable casa. Aunque sabían todos que sería complicado.

Y algunos notaban algo extraño. Alex, al entrar, se había sentido incómodo y se lo había comentado a Sofi y Queen, quienes habían concordado en su sentimiento. Pero, buscando que nada interrumpa sus vacaciones, decidieron ignorarlo. Aunque quizás no fuese muy buena idea.

Quizás tendrían que haberle prestado más atención a aquello, porque sólo era el comienzo de sucesos muy extraños para la PlayerZquad.

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AHRE #PlayerZquad