Tus huellas en mi camino [SPENCER REID]

17. Lo hicimos

La luz de mi gran ventanal siempre me despertaba justo al amanecer. Y no era malo ya que esa era la hora de arreglarme para ir al trabajo.
Recordé lo de anoche y sonreí, miré a mi lado de la cama pero él no estaba. Me asusté, tal vez se había ido.
Escucho un ruido en mi puerta y lo veo, con su cabello desordenado, una sonrísa en el rostro. En sus manos había una bandeja llena de comida.

- La señora María hizo todo esto. Realmente podrías haber dicho que tenías empleados. No hubiera salidos en calzoncillos.
Carcajee.

- Lo siento, sólo vienen en la mañana a hacer la limpieza. No me acordé. Bueno tampoco podía hablar mucho anoche- él se sonrojó.

Desayunamos juntos, luego nos vayamos, sí juntos. Ojalá todas la mañanas fueran así. Yo iba a luchar para que eso pasara. No lo volvería a dejar ir. Esta era mi oportunidad de ser feliz.

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- Es mejor que te bajes tu primero, digo para que nadie sospeche - le digo.
Acabo de comenzar este trabajo y sería una falta de profesionalismo simplemente comenzar una relación amorosa con uno de mis compañeros.

- Sí, es lo mejor.- Suspiró y se bajó del auto. Caminaba lento, tal vez triste por mentirle a sus compañeros.