Capítulo 17

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El camino fue bastante tranquilo, fue muy agradable poder sentir esa paz en mi interior. Estaba muy nervioso y asustado por lo que estaba por pasar, pero nada me tranquiliza más que una noche de sexo y un viaje tranquilo.

Cuando llegamos a Hiber recuerdo que di un suspiro antes de tocar, esta sería nuestra última parada antes de ir a atacar a CEP, estaba entusiasmado, pero lo disimulé. Cuando esas puertas se abrieron salió un hombre que al parecer tenía mi edad, él no negó al invitarnos a pasar.

-Bienvenidos a Hiber- Sonrió el hombre- Mi nombre es Peter, ¿en qué puedo ayudarlos?

-Quisiéramos hablar con usted sobre CEP- Respondí.

La sonrisa de Peter había desparecido, la expresión que se formó en su rostro reflejaba desconfianza en nosotros.

-¿Quiénes son ustedes?- Dijo molesto.

-No pertenecemos a CEP hombrecito- Dijo John con tono intimidante- Relajate.

-Vamos a un lugar privado- Respondió Peter. Nos llevó a su habitación, en el camino hacia a el pude ver como era Hiber, era mucho más grande que Los guardianes, no tenía un ambiente tan alegre, pero por lo menos las personas se veían seguras. 

-¿De qué se trata?- Preguntó Andy.

-Queremos unir fuerzas para atacar a CEP- Respondí. No valía la pena dar rodeos.

-¡Llegan en un buen momento amigos!- Respondió Andy contento- ya que yo también tenía planeado hacerlo- Profundizó su voz.

Entre los tres nos miramos asombrados tras la respuesta de Andy. Él nos explicó que lo llevaba tiempo pensando pero no sabía como ejercer su idea, le prometimos que diseñaríamos un plan tan perfecto que era inútil que fallara. Después de estrechar nuestras manos queríamos comenzar a diseñar el plan, pero en eso fuimos interrumpidos por unos golpes provenian de la puerta principal.

-Es él- Dijo Andy- Tienen que esconderse. Vayan a la armería y quédense ahí, yo les avisaré cuando salir- Dijo apresurado.

Obedecimos a Andy y tomamos las indicaciones que nos dio para llegar a la armería. Casualmente esta se encontraba muy cerca de la puerta principal, lo cual nos permitió poder oír todo lo que decían.

-Peter la próxima vez que me hagas esperar  juro que te romperte el cuello- Dijo Joe mientras ingresaba a Hiber con esos pasos grandes y largos que él siempre daba.

-Está bien- Respondió Peter.

-Peter, hoy sólo me llevaré un par de armas, ¿sabes? Te portaste muy estos días- Joe le dio una pequeña palmada en la mejilla.

-Claro Joe, se encuentran en esa caja de made...

-Espera Peter- Joe lo interrumpió- ¿Creías que tú me darías las armas? Yo iré por ellas- Sonrió.

Sentí como los escalofríos se adueñaban de cuerpo al escuchar que la puerta de la armería se abría. Traté de quedarme inmóvil en absoluto silencio.

-Peter me llevaré las escopetas, junto con...- Se quedó en silencio- ¿Oiste eso Peter?- Preguntó. Yo en ese momento pensaba en cómo podría atacar si nos descubría.

Joe no dijo nada más, sólo vi como se acercaba poco a poco hacia el escondite de Nancy.

-Hola Nancy- Dijo Joe con furia. A penas pude oir lo que dijo, su voz se torno más dura y profunda de lo normal. Tomó a Nancy de un abrazo y la levantó con fuerza provocando que ella diera un grito de dolor.

-¡Suéltame idiota!- Nancy trataba de luchar pero era inútil

-Joe suéltala por favor- Dijo Peter con la voz temblorosa- llevate todas las armas si quieres.

-No es necesario- Respondió sonriendo- Ya tengo lo que quiero. Tras ver que Nancy no dejaba de luchar Joe decidió darle un golpe en la cara, lo cual hizo que se desmaya.

Mis impulsos me decían que fuera hacia ella, pero John desde el otro extremo de la armería que dijo que no con la cabeza. Esa vez volví a sentir esa impotencia de tener los brazos atados y mis piernas pegadas en el suelo. Mientras veía como Joe se marchaba con Nancy mis ganas de matarlo aumentaban cada vez más. 

La Tierra De ZombiesWhere stories live. Discover now