Fenix de ardiente fuego

11 1 0
                                    

Todos tenemos una gran llama incrustada en nuestro pecho. Se aviva o debilita dependiendo de a lo que aspiras. Aunque creo que hablo en boca de todos que la llama siempre acaba debilitándose, y cuesta encontrar más combustible para que no muera. Buscas en un bosque cercano, pero está todo mojado. Buscas en casa de un amigo, pero ya todo lo ha consumido. Buscas hasta en el último rincón de tu casa, pero el tiempo en vano pasa. Cuando ya tu llama en cenizas se convierta, entonces llegará la lluvia de fuego, que la pondrá a arder más alta que el cielo. Y cuando ese momento llegué, que nada te pare.

Nunca te subestimes por qué eres imparable, no te desanimes pues todos pueden equivocarse.

Estamos listos para convertirnos en cenizas, por qué de ellas renaceremos y haremos de nuestros problemas trizas.

Mi llama tan potente puede llegar a ser, que las del resto no dejare perecer.

En este frio mundo de oscuridad, debe existir la solidaridad.


Y se me olvidaba mencionar que cada llama tiene un valor especial, todas tienen colores diferentes necesarios para un amor no artificial.

La llama sigue subiendo escalando el estrellado cielo, algo que seguirá haciendo sin recelo.

Tranquilo puedes acercarte ya que no quemo, es algo cálido que te ayudará hasta en un caso extremo.

Yo realmente no quiero ver el mundo arder, si no que con mi luz pueda florecer.


Mi tope ya he alcanzado, mi fogonazo ya está bajando.

Pero antes de volver a mis cenizas, recuerda las palabras ya dichas.

Ahora que tu llama vuelve arder, no me dejes caer.

Pues yo en todos vosotros confío, para afrontar el gran desafío.


Todos somos un gran fénix de fuego, que siempre consigue hacerse hueco.

En el fuego reside nuestra tenacidad, un rasgo de admirar.

Debemos cuidarlo siempre en nuestra vida, vida nuestra que cuida.

En ascuas ya me estoy convirtiendo, es tu oportunidadde hacer un incendio tremendo.    

Poemario de BarfemusuWhere stories live. Discover now