Mikuni-

873 54 9
                                    

-¡Las personas se alejan porque lo necesitan! -suspiré. -Ya no puedo hacer nada, no pudo haber pasado un montón de tiempo pero aún siendo Mikuni me sería difícil saber que piensa sobre ello.

-Pregúntale directamente -dijo mi amiga mientras me daba una palmada en el hombro.

-No, no puedo... No tengo idea ninguna de donde puede estar, aún así no me atrevería a hablarle, ¿sabes lo que me costaría?

Mi teléfono comenzó a vibrar y yo lo respondí no sin antes disculparme con Sara por ello. Era mi tía, rodé los ojos a enterarme por su voz.
Ella me contó que que quería una antigüedad, ¡¿quién en su vida querría una antigüedad?! Bueno... Entiendo eso pero porque pedírmela a mí, podría ir directamente ella.

Cuando terminé de hablar con ella rápidamente volví con Sara y me disculpé porque si quería ir por esa cosa que mi tía quería realmente me tardaría una eternidad. Ella comprendió inmediatamente y se mostró comprensiva ante ello, incluso se ofreció a acompañarme pero me negué, quería estar con ella pero no que perdiera su tiempo en algo no valioso y sin sentido.

Regresé a casa corriendo literalmente, odiaba los mandatos de mi tía, cuando ella quería algo tenía que ir inmediatamente por esa cosa si no me odiaba, ley de hielo y no sé que tonterías más se le pasaban a ella por la cabeza como niña pequeña.

-Aquí está la dirección -me dio un papel.

-¡Está realmente lejos! -di un suspiro -si te doy menos dinero del indicado será porque estoy tomando mi parte ~

Le dije y me fue rápidamente de ahí guardando lo que tenía, en la bolsa que tenía colgada.
Caminé un poco, era tranquilo salir, pero salir sola a veces se siente un poco feo... ¡aún peor!

Le di un vistazo más a el papel que tenía guardado, maldición... Aún me faltaba un montón ¿tan específicamente tengo que ir a comprarlo a esa tienda? Puedo tomar una alternativa y comprarlo en otro lugar aprovechando el tiempo o tal vez un precio más barato del que lo vaya a encontrar.
Miré a todos lados tratando de buscar una tienda que me pudiera ayudar, pero realmente nada; así que seguí caminando.

Recordé lo que hablé con Sara haciendo que me diera un golpe en la cara, ¡ha pasado tiempo! No debería estar preocupándome en Mikuni o algo parecido, ya me ha de haber olvidado y hecho su vida...
Pero conociendo su locura es casi algo imposible (no imposible pero con muy poca probabilidad).

Soy una de esas personas que cuando recuerdan algo (incluso sea algo gracioso) no pueden evitar hacer gestos, así que un par de personas al pasar me miraron raro.

-¡Necesito una tienda! -me hablé a mí misma y seguí caminando con a esperanza de encontrar algo rápido.

Corrí esperanzada hacia una tienda que vi cerca de donde yo, me detuve un momento y di un gran suspiro.
No importa en cuantas tiendas tenga que buscar (mientras no sea ir hasta allá) por mí está bien.
Incluso en el precio el dinero no es mío después de todo, así que da igual.

Abrí la puerta de aquellos tienda pero no había nadie, miré a todos lados con la esperanza de encontrarme con alguien ¿cómo pueden dejar algo así? Tan sólo...

-Buenas tardes...

-Oh... -escuché a alguien arriba -una señorita ~ ¿qué es lo que desea?

Mis ojos se abrieron de par en par, mientras mi pulso se comenzaba a acelerar; no sé si estaba siendo loca o el tiempo que me alejé de él me estaba afectando pero podría jurar que esa persona era Mikuni. Una risa súbita y nerviosa salió de repente de mi boca, trataba de ocultar mis sospechas, no sólo eso si no que no quería parecer una tipa rara.

Servamp One Shots ★Servamp x Lectora★.Où les histoires vivent. Découvrez maintenant