Cómo Entrenar A Tu Dragón: Recuerdos...

Capitulo veintitrés: La bienvenida y la sorpresa

Narra Hipo

Ya estábamos llegando y no esperaba más para llegar, ya tenia todo planeando para decirles una mentira que se me ocurrió al momento que salí de Berk y no sospecharan de la razón de por que me fui. Les diré que mi padre acepto que me quedara un tiempo en Paraíso y que reconociera sus áreas útiles para que nos pueda seguir que si plantas medicinales y esas cosas. Vi como Aren y las chicas me esperaban en el muelle y se podía ver que estaban felices por nuestra llegada, cosa que también me emociono. Hipo, saluda a tu nuevo hogar y nueva vida.

Hipo, muchacho, nos llego tú aviso y ¿no es muy temprano para la visita?--dijo Aren dándome una bienvenida algo amigable y las chicas se acercaban a abrazarme--no es que me moleste tu visita, pero ¿que no tus amigos venían contigo?

Si, mis amigos ah....solo vine yo, mi padre me pidió que como futuro jefe debería empezar a aprender me todo sus áreas, vegetación y todo eso--dije viendo que todos aceptaron mi mentira, excepto Engla que dudaba de lo que yo dije, hasta que se lo creyó--y eso significa que me quedare por aquí por un tiempo, por eso traje estas canastas que tienen ropa mía.

Bien, entonces te quedaras con nosotros como la ultima vez--dijo Engla hablando por su padre, lo cual éste acepto--mientras cuenta nos como están los chicos.

Si, ¿cómo esta Patapez?--dijo Kaira emocionada con una sonrisa y acercándose a mí.

Y también de Brutacio--dijo Helga de la misma forma que Kaira, solo que más cerca de mí y me quede sorprendido por lo que dijo, ¿acaso se enamoro de brutacio?--y el resto de ellos.

Bien, todos están Bien porqué no estarían de estarlo--dije fingiendo no saber lo que les hice a ellos--oigan no quiero estar todo el tiempo aquí en el muelle, así que voy a desempacar y nos vemos en el salón de reuniones, ¿nos vamos Engla?.

Si, vamos--dijo y empezamos a caminar hacia su casa con chimuelo detrás de nosotros y las chicas hablaban y se dirigida hacia al salón de reuniones--y no te escaparás de la verdad Hipo, me dirás el verdadero motivo de tu visita.

¿De qué hablas?--dije nervioso, mientras Engla me miraba con una cara seria, es muy inteligente esta chica. Hací que debo pensar algo rápido para convencerla y no diga nada sobre que le diré, porque si me quedare con ellos en su casa tendré que decírselo, sino no me dejaran dormir hasta que lleguen los de Berk--bien, te lo diré, pero solo te lo diré cuando estemos solos y jures que no se lo dirás a nadie.

Ok, de una vez te lo juro--dijo para abrirme la puerta y subir a la habitación donde me quedaría, empecé a desempacar mientras que Engla se acostaba en mi cama y chimuelo, quien entro por la ventana, solo dormía por el largo viaje--y bien...empieza.

Bien, pero antes tengo que decirte que el día en que nos íbamos y tú y Astrid se durmieron sobre mi, escuche toda su conversación--dije a lo cual se sorprendió y solo puse mi mano sobre su hombro.

H-Hipo y-o yo te lo puedo explicar--dijo nerviosa y sonrojada, solo la Callé con mi dedo en sus labios.

Tranquila, no es nada malo--dije calmándola--pero si yo realmente te gusto, te tengo una pregunta ¿si te gustaría qué fuéramos más que amigos? Si sabes a lo que me refiero.

Hipo, yo no puedo hacerlo, en serio--dijo sorprendida y apartando mi dedo de sus labios.

Si es por lo de Astrid, ya no me importa ni ella ni Berk, ¿qué dices? ¿acepta la oportunidad?--dijo empezando a desesperadome, ella empezaba a cambiar de tema y eso no era bueno.

No, hasta que me digas que fue lo que paso--dijo molesta.

Pero que quieres saber de ellos, si el primer día que estuvieron aquí, hablaron cosas que no debían, obligándome a decir todo lo que me paso y por eso toda tú gente quería tratarlos igual que a mí, que en realidad me hubiera gustado ver eso--dije también molestándome.