Dicen que las historias de amor se acabaron,dicen que cada vez que empieza una historia de amor termina con corazones rotos,lagrimas por infidelidad o porque uno ya no corresponde ese amor.
Lauren Jauregui una interna del hospital de Canadá,Lauren vivía de salvar pacientes y de ayudar a los que lo necesitaban.
A lauren siempre le gusto la idea de ayudar desde que su padre murió en sus manos,desde ese mismo día no quería sentirse inútil cuando alguien necesitaba de su ayuda,ella quería saber que hacer cuando algo así sucediera.
Lauren era torturada por la señorita Contreras,el cual era la encargada de los internos de su piso.
Hoy era una mañana muy tranquila el cual para ella era muy extraño porque estaba muy acostumbrada a la acción y al movimiento.
Lauren miraba alrededor sintiendo un presentimiento en su pecho.
-Hey Lauren te encuentras bien-pregunte mi compañera interna.
-Si,es solo que tengo un presentimiento en mi pecho-
Normani no pudo continuar cuando los para médicos entraron con brutalidad por la puerta de emergencias.
Lauren corrió por instinto hasta ellos,uno de los para médicos empezaron a dar el expediente de la paciente.
-Camila Cabello,chica de 18 años que sufrió lecciones en el cráneo,cortes en el brazo izquierdo uno de los metales del auto calló sobre su pecho a causa de accidente de tráfico-
Lauren los examinó un momento,notando que la chica menor estaba cubierta de sangre y se lo hinchada que estaba no se podía distinguir.Lauren siguió examinando cada detalle de su cuerpo hasta que paró en su mano izquierda,mantuvo la mirada ahí más de la cuenta.
Llevaba el mismo brazalete que ella,no podía apartar la vista de su muñeca.
C-Jauregui es tuya,llévala a quirófano para llevar una cirugía de emergencia,sabes que hacer verdad-dijo la jefa
-Así es jefa-afirme.
Hice inmediatamente lo que la jefa me pidió,con la ayuda de Normani y algunos enfermeros.
Empujamos la camilla hasta el piso de cirugías.
Una vez que llegamos Normani estaba preparando a Camila y yo en cambio me estaba lavando para entrar en acción.
Antes de entrar ahí,me quede observando detrás de la ventanilla con mis manos recargadas sobre el lava manos.
-Doctora tiene que entrar ahora si no la paciente perderá más sangre de la que ya perdió-
-Si claro-dije cruzando la puerta que conectaba con la Habitación donde estaba aquella chica esperando por una oportunidad de vivir.
-Es una hermosa tarde para salvar días,empecemos-dije dándole una mirada a las enfermeras.
Después de eso abrí su pecho para poder sacara los cuabulos que se habían formado dentro de ella a causa del golpe que recibió en su pecho durante el accidente.
La operación estaba siendo un éxito hasta que la máquina dio aviso de que la presión estaba bajando.
-Doctora tiene 55 de pulso-dijo una de las enfermeras
-Esperen-dije mientras seguía estripando los cuabulos.
La máquina seguía marcado que su pulso seguía bajando,antes de seguir sacando los cuabulos mire una mancha negra en la parte de su corazón.
-Doctora-presiono la enfermera.
-si-dije empezando a dar masajes delicados en su corazón para fortalecer su pulso.
