Eran las 12:45 de la noche, acababa de cerrar en su trabajo, normalmente salia mas temprano, pero habia decidido cenar en el trabajo; no habia nada mas que un carton de jugo y una comida vieja en su refrigerador, y como en su trabajo tenia comida gratis decidio guardar un poco de dinero, la quincena estaba lejos. Mientras caminaba por aquellas calles solitarias, mas de lo normal para ser un miercoles por la noche, se lamentaba de haber tardado tanto, estaba acostumbrada a caminar tan tarde por aquel lugar, pero era diferente, la noche se sentia mas fria que una de marzo cualquiera y el viento empezaba a soplar, empezaba a parecer una pelicula de terro, y ella sabia como terminaban personajes en aquella situacion. Caminó mas rápido, queria llegar a su viejo departamento y sentirse segura en esos pequeños metros cuadrados. Pero escuchó algo...hojas, crujir de hojas, pero ¿por que crujirian las hojas? un gato, sintió tranquilidad, solo era un pequeño en su caminata nocturna; pensó si tendria preocupaciones como ella las tenía. Pero, el gato gruño, estaba nervioso ¿por que debia estarlo? solo eran ellos dos, entonces, el gato salio disparado y ella lo perdio de vista, empezó a caminar, casi correr ¿que lo espanto?! empezo a sentir su piel cada vez mas erizada, el miedo empezó a apoderarse de ella, faltaban unas calles para su casa, "solo 3 más" se repitió nerviosa esperando encontrar la tranquilidad en aquellas palabras. Dio vuelta en la esquina, cada vez sintió las calles mas oscuras, se sentía desfallecer, no sabia lo que estaba pasando, entonces, lo sintió, sabia que habia algo detras de ella, empezó a correr, sabia que estaba detras de ella, no sabia que forma podria tener, pero lo sentia detras, casi podia sentir su respiracion! podria ser lo que sea! Corrió todo lo que pudo, cruzó el resto de la calle y entonces sintió como algo cayó de su bolsa; no importaba, necesitaba llegar a la seguridad de casa, solo unos metros mas! Un edificio mas! Estaba frente a la puerta, buscó; las llaves! las llaves se habian caido! entonces lo sintio en su hombro...
-Se te cayó, debes tener mas cuidado- le dió las llaves, solamente era Fernando el vigilante de la zona
-gracias- asintió y tomó sus llaves para entrar en el departamento, una vez dentro decidió dejar de leer a Lovecraft.
