Huyendo de mi propio YO

3-Chico nuevo

Hago un par de apuntes como pide el profesor, faltan 5 minutos para que termine la clase y toque recreo, ya tengo el culo chato de estar sentada dos horas seguidas.

-Chicos no se olviden que la próxima clase les tomo examen sobre lo que estudiamos hoy. Así que prepárense no quiero la mitad del curso desaprobados.-. El profesor repite por segunda vez lo mismo y se perfectamente que va para mi, soy una de las chicas que desaprueba siempre.

Toca el timbre y veo salir a todos, cuando ya no ha quedado nadie en el aula recojo mis cosas y salgo tranquilamente de allí. Pero apenas salgo me pongo tensa al notar que la sensación de cuando estaba en la biblioteca vuelve. Alzo mi cabeza para volver a fijarme de quien puede ser y no hay nadie en el pasillo solo estoy yo y el chico misterioso del aula, que por cierto es nuevo y se llama Derek. Es lindo, tiene un pequeño tatuaje en la nuca, el pelo es marrón casi negro, su piel es tan pálida como una hoja en blanco, también es alto, debe medir un 1,75...Pero sus ojos no lose es un misterio, mientras pasó al frente para presentarse tenía su mirada baja, y cuando se dispuso a alzar su cabeza se fijo en mi y volvió a bajarla como si tuviera miedo o vergüenza, levante una ceja extrañada por su actitud al verme, y pude notar como su cara se volvía completamente roja.

Veo que tiene un libro en sus manos y me da intriga saber que es lo que lee, decido pasar por detrás de él, y me llega un aroma tan masculino y rico, que cierro mis ojos para disfrutar más y grabar ese perfume en mi mente. Al fijarme que es lo que lee, reconozco la portada y me emociono al saber que está leyendo mi saga favorita "Crepúsculo", veo que nota mi presencia y se fija un momento en mi, le sonrío con una sonrisa simpática como suelo hacer pero esta es una verdadera, porque nunca vi a alguien y menos a un chico leer esta saga. Noto que abre los ojos sorprendido y sus mejillas se ponen de un color rosa que lo hace ver tierno. Me rio al ver tal imagen y lo nota, lo cual hace que su cara se vuelva de un color rojo. Me giro para ya no incomodarlo más y sigo mi camino.

Me dirijo hacia la biblioteca como siempre hago en todos los recreos. Al entrar tomo siento y saco mi celular para escribirle a mi padre sobre que me pase a buscar cuando termine mi horario de instituto, a lo que él me responde con un sí, que pasara la tarde conmigo y mi hermana, como solemos hacer todos los días.