Dos.

11 1 0
                                    

De pequeños no hacemos más que preguntarnos quién nos "gusta"; quién nos "atrae" de una forma más allá del cariño y la amistad. Solemos tener al menos uno, dos o incluso más personas de las que decimos estar enamorados.
En la adolescencia la cosa empieza a cambiar. El número de personas disminuye, e incluso nos mantenemos "enamorados" por más tiempo. Nos sentimos en una nube: todo es maravilloso, y sentimos las afamadas "mariposas" en nuestro estómago. Nuestros problemas desaparecen, y el mundo parece ser más colorido. Parece. Entonces llegan los problemas. A tí y a tu mejor amigo o amiga os gusta la misma persona. ¿Qué haces, te resignas a perder una amistad con tal de lograr la posibilidad de estar con esa persona? ¿O renuncias a aquello que consideras lo más hermoso que te ha sucedido jamás con tal de no perder una amistad?
No es una decisión fácil, ¿verdad?

¿Amor? Where stories live. Discover now