CUIDARÉ DE TÍ

CAPÍTULO 1

# información adicional; aquí la pongo con el nombre original con el que será publicada...

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A SALVO EN TUS BRAZOS

Sub

CUIDARÉ DE TI

Ese día en especial no tenía el más mínimo deseo de ir a su trabajo; estaba harta, si tan solo pudiera librarse de su padre, pero le faltaba dinero para eso, y lo más importante, valor. Finalmente, aunque no le gustara, debía continuar con su poca satisfactoria rutina; era lunes y el director del hospital la tenía trabajando en un área que no era la suya, esto solo lo hacía para desquitarse de ella por la cantidad de veces que se había negado a complacerlo; y aunque hasta ahora lo había hecho con toda la diplomacia que poseía, su buena disposición estaba a punto de colapsar.

Llegó al hospital a tiempo y preparó todo para atender a los pacientes que le habían asignado. Su jornada dio comienzo con la misma convicción, pero sin la mínima motivación y todo hubiera sido igual de parco si una hora después, su consulta no llega a ser interrumpida; toda la zona del hospital donde estaba su consulta fue despejada y un hombre de traje oscuro y gafas igualmente oscuras, entró siguiendo a la jefe de enfermería para anunciarle que una paciente no registrada ingresaría con atención prioritaria. El hombre de traje revisó todo el lugar y luego anuncio levantando su mano hasta que su reloj de muñeca llegó cerca de su boca, que todo estaba en orden.

Minutos después ingresó una mujer se podría decir que de su edad y en cuanto Amy la vio, la recordó; la había atendido unas semanas atrás, después de que ella hubiese sido atacada en su lugar de trabajo, sin pensarlo demasiado la saludo con una sonrisa genuina en el rostro, le caía bien esa joven

- hola – le tendió la mano por encima del escritorio – ¿me recuerda? – aquella le devolvió la sonrisa

- por supuesto, no ha pasado tanto – y agregó – pero tengo entendido que esta no es su área

- ¡oh! Tiene razón, en realidad soy traumatóloga; por algunos inconvenientes he tenido que cambiar a esta área, solo temporalmente; hace dos semanas que estoy aquí

- siento mucho escuchar eso doctora – Amy le obsequio una sonrisa y sacudió una mano restándole importancia

- ni se preocupe, ya encontraré como arreglarlo – luego de conversar unos minutos más, su inusual paciente procedió a comentarle lo que la llevaba allí; sospechaba que estaba en embarazo y deseaba comprobarlo

Amy la examinó con minuciosidad y luego de unos minutos le confirmó el embarazo, más tarde salió con ella a acompañarla hasta la sala de espera después de prometerle ir al día siguiente a donde, Madison Scott, su paciente, trabajaba.

En la sala la esperaban, además de un par de hombres de seguridad, una hermosa joven muy parecida a Madison y dos hombres jóvenes y muy guapos a los cuales ella también recordaba

- chicos, les presento a la doctora Amy Lorenz, es probable que Doug y Dave la recuerden de la vez anterior que me acompañaron a verla hace algunas semanas

- la recuerdo; mucho gusto doctora, Doug McDonnell

- el gusto es mío; pero por favor llámeme Amy, nada de doctora – enseguida recibió el abrazo de la joven que acompañaba a los hombres

- para mí también es un gusto Amy, soy Allison, hermana de Madison – entonces la doctora encaró a Dave, quien le obsequió una sonrisa sincera

- un placer Amy; bueno, imagino que ya nos tienen noticias ¿seremos tíos?

- lo serán – la que respondió fue Madison que no podía ocultar su dicha