My Precious Memory

capítulo 18

Kick estaba en su cuarto vistiéndose un traje formal que Linnie había comprado para ser su secretario, tenía que usar corbata, el temerario veía esta prenda como una correa para perros, su camisa blanca impecable adentro del pantalón negro con una correa del mismo color; Kick no pudo aguantar más y se sacó la camisa afuera del pantalón, se desabotono el primer botón de la parte superior de la camisa y dio una ojeada al saco negro que estaba tendido en su cama, este traje era demasiado "elegante" y eso no le gustaba para nada.

-¿Cómo pude caer tan fácilmente?- dejo escapar de sus labios como un susurro

-porque Rock Callahan nos habló- contesto Gunther inocentemente mientras salía del baño muy bien arreglado, su pelo rubio peinado para atrás, una corbata bien puesta, la camisa blanca dentro del pantalón y su saco abotonado los tres primeros botones inferiores- Kick, estas desarreglado, déjame ayudarte

-no, estoy bien así- gruño Kick retrocediendo unos pasos ya que Gunther quería acercarse a él

-tu saco- pronuncio esa palabra detestable para Kick, Gunther miro el saco de Kick tendida en su cama- debes ponerte

-claro que no, todos menos el saco- dijo Kick molesto

-chicos- una voz melodiosa se escuchaba fuera del cuarto, los dos jóvenes sabían de quien pertenecía aquella voz tan suave, frágil y a la vez tan… temible- Tengo una conferencia en cinco minutos si no salen en este momento arrancare sus ojos y los pondré en un frasco con agua que será adorno para mi oficina, ahora SALGAN YA

Gunther y Kick salieron de inmediato del cuarto, la rubia los esperaba molesta, parada justo al frente de ellos dos.

-les diré una cosa, la puntualidad es uno de mis dones, no me gusta gastar ni un minuto de mi valioso tiempo en cosas sin importancias, si llego tarde un segundo mis colegas se van, todo mi esfuerzo se va a ir al suelo y perderé una grandiosa oportunidad y a mi NO-ME-GUSTA-PERDER ¿me entendieron?- dijo cada vez más amenazante Linnie

-No estoy seguro de esto Kick, ella me está dando miedo- susurro Gunther al oído de Kick

-deberías bajar un poco de voz, estas en mi casa- dijo seriamente Kick con unos ojos desafiantes, Linnie al ver al muchacho queriendo defenderse sonrió maliciosamente y se acercó al joven mirándolo fijamente

-soy tu jefa- dijo Linnie con firmeza y una sonrisa de triunfo

-y yo puedo renunciar- dijo Kick con una mirada asesina, al escuchar la última palabra que dijo Kick, Linnie se comenzó a reír fuertemente

-¿dijiste renunciar?- dijo entre risas Linnie- has firmado un contrato que no puedes renunciar, deberías leer las letras pequeñas casi invisibles de leer, amigo- acentuó la última palabra

-sopas- quejo desanimado Kick

-genial- dijo con sarcasmo Linnie mirando su reloj de mano- tengo solo cuatro minutos para llegar al edificio- Linnie volteo se fue hacia la salida de la casa, los dos jóvenes siguieron a Linnie; afuera de la casa los esperaba un carro negro con vidrios brindados, muy bien pulido.

-señorita Linnie está atrasada- dijo el chofer del nuevo auto

-lo sé Mario- dijo Linnie abriendo la puerta de su carro, entró al igual que Gunther, cuando Kick estaba a punto de entrar, tuvo una idea… atrevida, pero buena.