Un Breve Espacio

914 7 2
                                    


-¿Quieres salir? Tengo ganas de ir a caminar por allí- dijo Huitzil a Diana mientras preparaban el desayuno.

-Pues no tenía la intención de salir, preferiría quedarme y no sé, ver películas- respondió ésta mientras servía chilaquiles en un plato.

-¿Qué te parece si vamos al zoológico y luego te invito al cine ver una?-

-¿Pero no tienes que trabajar?-

-Eso puede esperar un día o dos más, además Roga sabe que estoy crudo y enojado, dudo que tenga la desfachatez de pararse por aquí- Dijo Huitzil con una amplia sonrisa

-Bueno siendo así, vallamos al zoológico-

Después de desayunar y darse un baño los enamorados salieron del departamento.

...

-¿En serio hiciste eso?- Pregunto Diana mientras caminaban tomados de la mano por Chapultepec

-Sí, mi primo se había quedado dormido por la borrachera y entando borrachos Jonny y yo, pues decidimos hacerle una broma- Huitzil dejo escapar una leve risita.

-Este lugar me gusta- dijo Diana

-Es agradable tener aunque sea un pequeño oasis verde en medio de la ciudad-

-¿Y si nos sentamos?- preguntó la joven para instantes después señalar un pequeño lugar bajo un árbol -ese parece un buen lugar- su compañero solo inclino la cabeza en un gesto de aprobación.

-Podría quedarme aquí por siempre- articuló Huitzil después de algunos minutos de relajación con la cabeza recargada en las piernas de Diana y ésta bajó la mirada tornándose un tanto triste.

-¿Qué tienes, dije algo malo?-

-No, es solo que algún día tendrás que irte-

-Bueno sí, tengo que entregar la portada y salir de vez en cuando pero no es para que te pongas así- La joven guardo silencio por unos minutos.

-Sé que te ha ido mal últimamente, pero dentro de todo lo malo resulto algo bueno ¿no crees?-

-¿Cómo qué?-

-Me conociste y estoy aquí contigo ¿no?- Huitzil esbozo una sonrisa, a lo cual Diana respondió poniéndole la mano en el rostro cubriendo aquella sonrisa.

-Eres bastante egocéntrico ¿sabías?- y tras decir esto empujo la cabeza de Huitzil mientras se ponía en pie y salía corriendo, al ver esto el joven se puso en pie y corrió tras ella tomándola por la cintura cayendo ambos al pasto entre risas y jugueteos. Para las personas que por allí pasaban eran como un par de adolecentes viviendo la magia del primer amor y ante las constantes muestras de cariño alguna voz impertinente gritó:

-¡Váyanse a un hotel!- a lo cual ambos jóvenes rieron en forma escandalosa.

Después de remar en el Lago y visitar el Castillo de Chapultepec se dirigieron a la Feria un parque de diversiones ubicado no muy lejos de allí

...

-¿quieres bailar?- Pregunto Huitzil al bajar de La Montaña Rusa

-¿Bailar pero no hay música?-respondió Diana con una sonrisa

-Entonces te cantaré- dijo éste mientras la tomaba dulcemente por la cintura y comenzaba a tararear una vieja canción de The Beatles:

"There's nothing you can do that can't be done
Nothing you can sing that can't be sung
Nothing you can say but you can learn how to play the game
It's easy"

Cuentos Cortos Para niños Grandes IIWhere stories live. Discover now