El amor es como una función de fuegos artificiales. Comienza como un sentimiento de ansiedad que te hace querer apreciarlos, te da curiosidad. Se dispara de una forma impredecible, sube y estalla enseñando sus formar y colores. Te transmite una inquietud casi adictiva y luego, se va apagando lentamente.
–Un Beso Bajo La Lluvia