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El viernes por la mañana, Taeyong aún no estaba más cerca de decir que sí que el miércoles. Cada parte de él cuestionó los motivos de Ten. Habían sido amigos durante mucho tiempo, el tiempo suficiente para saber que Ten hablaba en serio porque el hombre nunca hizo nada sin pasar por todos los pros y los contras primero. Pero el sexo con un hombre ¿Por qué? ¿Qué lo había impulsado? Ten nunca había mencionado que era curioso antes, y Dios sabe que habría tenido muchas oportunidades de plantear el tema en el pasado. Entonces, ¿por qué ahora?

Agarrando un taza del armario, Taeyong se sirvió café, sus acciones fueron automáticas mientras su mente luchaba por encontrar una razón para la repentina propuesta de Ten. Y eso fue otra cosa

Ten había sido bastante firme en que iba a hacer esto, con o sin la ayuda de Taeyong, y eso realmente le preocupaba a Taeyong

Ten no fue estúpido. A pesar de su pretensión de investigar, él sabría los peligros reales de simplemente acostarse con un tipo al azar. No había muchos hombres a los que les importaría ser virgen o tomarse el tienpo de presentarle el sexo gay correctamente. Si Ten realmente quisiera hacer esto, necesitaría a alguien que lo hiciera bien. Alguien que cuidaría
de él, lo tomaría con calma y lo trataría con delicadeza, como se merecía. No es que Ten pensara que merecía un trato preferencial, pero no correría el riesgo de lastimarse. Entonces, ¿por que la amenaza? ¿O simplemente lo había dicho porque Taeyong había dicho que no?
Ten tendría que saber que Taeyong no hubiera aceptado tal cosa, ¿no?

Más confundido por el momento, y renunciar a tratar de resolver esto ahora, Taeyong enjuagó su taza y agarró las llaves de su camión.

El sitio de la construcción que estaba visitando no necesitaba mucha atención, lo cual era bueno, porgue apenas le daba ninguna. Al final del día, un dolor de cabeza comenzó a formarse detrás de sus ojos, y se
preguntaba qué iba a hacer cuando Ten le pidiera su respuesta. Consideró solicitar una extensión de tiempo, pero no estaba seguro si Ten le daría uno. Esa oportunidad se le escapó cuando recibió un mensaje de texto en su teléfono.

Encuéntrame en Danny's

Danny's era su local, y era terreno neutral. Taeyong supuso que era un lugar tan bueno como cualquier otro, y esperaba que hubiera menos posibilidades de que alguno de ellos causara una escena de esa manera.

Aun así, se necesitó mucho más coraje de lo que había pensado para cruzar la puerta y entrar al ruidoso bar

Ten lo estaba esperando. Estaba sentado con calma en una de las mesitas escondidas en una esquina. Había dos botellas de cerveza en la mesa.

"Hola." Ten se paró un poco y luego volvió a sentarse. Parecía que había estado a punto de abrazarlo, lo cual, aunque lo hicieron en ocasiones, no parecía apropiado ahora. En ese instante, Taeyong tuvo su respuesta. Si ahora estuvieran incómodos entre ellos, ¿cómo sería si él continuaba y le daba a Ten lo que quería?

Se sentó en el lado opuesto, la preocupación estropeó su mente.

La amistad de Ten significaba demasiado para él.

Desde que se reunieron en el trabajo cuando se unió a la compañía hace casi un año, hicieron clic. Le había tomado un tiempo a Taeyong admitir que es gay, pero a Ten no le había importado, de hecho había alentado activamente a Taeyong a salir abiertamente con el resto del personal. Sin repercusiones, se había sentido más feliz de lo que había sido durante mucho tiempo, y había permitido que esa felicidad afectara cómo pensaba sobre Ten. No podia arriesgarse a perder eso, incluso si eso significaba decepcionarlo.

Sin embargo, cuando echó un rápido vistazo a la expectación en la cara de su amigo, repentinamente pensó en algo. Las fantasías privadas de Taeyong
de follar a Ten eran solo eso, fantasías. Nunca los había expresado, ni siquiera los había insinuado, pero, ¿Y si de alguna manera, Ten se había
enterado de lo que a veces pasaba por la mente de Taeyong? Preguntándose si esa era la razón por la que Ten estaba haciendo esto, Taeyong gimió.

I Know That You WillМесто, где живут истории. Откройте их для себя