Paso 5:

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||Narración normal||

La ida a la casa de Alaude a partir de ese momento fue en silencio, un viaje tranquilo.

Llevarse las cosas fue rápido ya que la mayoría eran del departamento, el chico tan solo llevaba fotos, libros, su ropa y poco más, entregó las llaves a su casero y cuando menos se dio cuenta ya estaba de vuelta en aquella mansión que a partir de ese momento sería su hogar.

Al llegar los esperaban Usami y un joven de cabellera celeste, que recibió con un beso al neko, entonces el de cabello bicolor recordó lo que le había dicho Natsu cuando bajaron del coche, ese debía ser el esposo de Kirie, a primeras la impresión fue imponente ya que era alguien bastante alto, el metro noventa era seguro que lo pasaba, además de que tenía buen fisíco por lo que se apreciaba.

(..Seguro es de esos tipos super celosos que a la primera te golpean si miras tantito a su pareja...)-. Alaude sabía que no debía juzgar a nadie por la primera impresión pero fue lo que pensó al ver a aquel joven que se fue con el neko una vez le ayudó a dejar sus cosas en la que sería su habitación.

Bien, es la 1 de la mañana, tenemos 5 horas para que aprendas lo necesario, andando-. Antes de que el de cabello bicolor preguntara sobre ello Natsu llegó con ellos y se vió cegado por un gran resplandor que duró unos segundos.- Abre los ojos Alaude.

Al abrir los ojos, el mencionado se vio sorprendido, estaban en una gran pradera y era de día, Usami le señaló al frente y vieron una humilde casa en medio de el lugar, Alaude retrocedió lentamente y pellizcó su brazo en busca de la típica explicación de que era un sueño y que si se pellizcaba despertaría del mismo.

No es un sueño, tampoco una ilusión, estamos en otro sitio, una dimensión que es regida por otras leyes del tiempo y espacio-. El conde comenzó a caminar un poco, pero detuvo el paso al ver que un señor se acercaba a ellos y sonreía cálidamente, Usami una reverencia una vez esttuvieron de frente.- Señor Amano, nuevamente estoy en deuda con usted al permitir que usemos su hogar como zona de entrenamiento, carezco lamentablemente de alguna expresión de gratitud en esta ocasión, así que disculpeme por favor.

Vamos Usami, te he dicho muchas veces que me llames tío Yukiteru y que no tienes que ser tan formal cada vez que vienes-. Amable como de costumbre, el padre de Natsu lo recibió y le revolvió el cabello suavemente al ojivioleta mientras miraba curioso a Alaude.- Natsu me comentó brevemente que tenías a un nuevo sirviente, he de suponer que es él, mucho gusto muchacho, mi nombre es Yukiteru Amano.

El señor Aman.. el tío Yukiteru es el dios del tiempo y espacio de este mundo, aquí el tiempo corre de manera acelerada si la comparamos al del nuestro, mientras que aquí transcurre un año en el nuestro apenas y ha pasado una hora-. La explicación era sencilla y Alaude la comprendió, pero no dejaba de sentir algo de miedo, pero no podía acobardarse, había decidido aceptar el empleo después de todo.- Estaremos aquí cinco años apróximadamente para que seas capaz de aprenderlo todo, a excepción de las lecciones de repostería, esas las aprenderás en la mansión de manera más tranquila ¿Entendido?

Alaude asintió y la determinación fue notoria en su mirada, daría lo mejor de si para que todo lo que fuese a aprender se quedara grabado en su mente.

Siendo así, el primer día de entrenamientos de 1,865 días comenzaba.

[<-~×☆×~->]

Cinco años transcurrieron en un abrir y cerrar de ojos para Alaude, todo tipo de vivencias le pasaron mientras estuvo en aquel mundo donde solo convivió con Yukiteru, una mujer llamada Minene, una pequeña llamada Murumuru y por supuesto Usami.

Dulce receta diabólicaWhere stories live. Discover now