¿ Perfecto amor ? ( Abraham Mateo )

Capitulo 25

Narro yo:

Me levanté a la mañana siguiente de la pelea de Abraham.

Estaba durmiendo con Lucia  en la habitación.

Estaba con un pijama de pantalón corto y camisa corta, pero me tapé porque hacia un poco de frío.

Cuando me levanté, fui al baño a hacer mis necesidades, cuando vi a Abraham tumbado a mi lado.

- Pss Abraham - Susurré.

El abrió un ojo y lo volvió a cerrar al verme.

- Si... ? - Dijo con dificultad.

- Mueve el culo hasta la cama de enfrente - Le dije.

- Mm... si...-

Muevete - le dije dandole patadas para que se fuera de la cama.

De una patada lo tiré, y yo me puse en forma de estrella.

- Por fin toda la cama para mi - Dije. Sinceramente, esperaba que estallara una de nuestras guerras, pero, no paso nada! Así que me asome a mirar.

Abraham estaba durmiendo en el suelo, era tan cuqui...

- Te tengo! - gritó Abraham, a lo que yo respondí con otro grito, y me tiro encima suyo en el suelo.

- Puto me has asustado! - grite, a lo que el rió.

- Idiota - continúe dejandome caer a su lado, con mi cabeza en su torso.

- Ya no estas enfadada por lo de ayer? - Dijo Abraham.

- Mmm... no se, no se... - dije y el puso carita de corderito degollado.

- Que perra - dijo Abraham, yo reí y le respondí.

- Lo sé, pero me quieres mucho - le mire y Sonreí.

- Claro que si peque  - dijo.

- Eh! Solo tengo dos años menos que tú, no soy tan pequeña! - Dije y le empuje.

- No te enfades peque - Dijo.

- Imbécil - Dije, a lo que el rió.  - Voy a pedir algo

- Que? Ya vas a ponerte como una foca? - dijo Abraham, yo rodee los ojos.

- No, solo voy a pedir magdalenas, napolitanas de crema, galletas con pepitas de chocolates, tostadas de mermelada de arándanos, bizcocho de frutas, helado de yogur, chocolate caliente y tortitas con sirope - añadí - y como eres mi mejor amigo, lo pagas tu.

- Claaaro - Dijo Abraham.

- Jo... Pero tu no lo necesitas, eres rico... - dije - y famoso

- Tal vez como tú cuando cantes en mi nuevo videoclip ! - Cuando dijo esto, grité como mil chihuahuas y me lancé a los brazos de Abraham