-¡Naruto!,¿cuantas veces debo decirte que no debes dormirte sobre esos pergaminos?-. El nombrado se levanto de su lugar y miro a un peliplata que estaba sentado detrás del escritorio. -Kakashi-sensei, ¿Cómo quiere que no me duerma si no me a dejado en paz?-
Kakashi lo miro con aburrimiento, el tenia razón pero el motivo por el cual se encontraban en esas condiciones era por el simple hecho de que el quería ya dejarle el cargo de Hokague a Naruto, los ancianos le había dado una orden que según en su opinión era pura basura, algo querían y no era que el fuera feliz. -Naruto, se que estas cansado, pero recuerda que vas a ser el futuro Hokague, debes estar preparado -.
El rubio lo miro de mala manera - Pero Kakashi-sensei, usted apenas asumió el cargo -.
Una cara de fastidio se dejo ver en Kakashi y solo movió la mano de arriba abajo - puedes irte, pero llama a Shikamaru y por cierto, salúdame a Temari -.
Naruto lo vio con confusión, pero pensó en el ramen que podía comer y salió del lugar.
Kakashi soltó un suspiro de resignación, sabia que Shikamaru pasaría por su puerta todo sonrojado, contó uno, dos, tres y ahí estaba el moreno pasando por la puerta, su cara roja le hizo sonreí, había sentido cuando Temari había entrado a la torre y como Shikamaru se escapaba de la oficina en silencio. -Espero hayas descansado bien, tortolito -. Ver a su asistente estrella con esa mirada era oro puro.
-Muy gracioso -.
-Vamos Shikamaru, estoy encerrado aquí todo el día, necesito algo de diversión - El moreno rodó los ojos, pero se acerco al sillón que estaba en la oficina. - ¿Qué es lo que necesitas?.
-Bueno veras mi joven secretario, el consejo me a pedido cumplir una tarea un poco tonta en mi punto de vista, sin mas embrollo, me han pedido casarme El semblante de Shikamaru cambio y se tenso. -Entonces por eso quieres que Naruto tome el puesto lo antes posible... -.
El silencio en la oficina fue grande pero lo interrumpió un pequeño toque en la puerta. -Adelante- dijo Kakashi sin mas. La puerta se abrió dejando ver una pequeña figura, avanzo con paso firme pero elegante, su cabello oscuro y largo se dejo ver y su piel blanca que hacia contraste daba un aire de tranquilidad.
-Hinata-san ¿Qué te trae por aquí? -
La nombrada solo hizo una pequeña reverencia, pero tardo un segundo en contestar - Usted me pidió venir Hokague-sama -. Kakashi miro en sus recuerdos, y si efectivamente el la mando a llamar, pero no recordaba el por que. -Oh es cierto, hay una misión - dijo no sonando muy seguro.
-¿Ocurre algo? ¿Hokague-sama?, si quiere puedo venir mas tarde -. A Kakashi se le iluminaron los ojos, Hinata siempre era tan comprensiva.
-¿Podrías? - fue lo único que salió de la boca del Hokague. La ojiperla solo hizo otra reverencia y salio de la habitación.
El silencio volvió a reinar, pero el sonido de Shikamaru parándose llamo la atención de Kakashi.
-Tengo una idea, Hokague-sama. Usted se casara-
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