"Vieron el amanecer del primer día de otoño juntos"
Supuse que seríamos dos almas en busca de amistad recíproca, de momentos comunes para compartir una sonrisa, o un "¿cómo estás?", un café o un cigarrilo. Nunca imaginé que fueramos a caer en el letargo de un amanecer de otoño. Rodeados de hojas secas, rayos de sol acariciando nuestras mejillas y viento fresco que erizaba nuestra piel.
Aquel amanecer inolvidable, entre politica y dulces. Chistes de feria y desayuno de la nobleza. Entre comunes intereses, pasos coordinados, ritmos cardíacos acelerados. Y un previo momento de leve introspección física, sutil e intensa.
¿Quién diría que después nuestros circuitos se unirían?
Quién diría, que en esa mañana de otoño aparecería la curiosidad mutua, un acuerdo entre nuestras mentes y memorias. Y que ese sutil rayo que iluminaba la avenida me haría ver en tu mirada el reflejo de tu alma azulada.
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Inflexiones del alma
RandomPensamientos e historias, creados en el momento menos esperado.