La perilla de la puerta fue girando lentamente y yo fui retrocediendo, tenia miedo de ver a ese calvo de gafas otra vez y que me lastime o algo. Entonces la puerta se abrió con fuerza y entró un tipo bastante alto, quizás unos diez o quince centímetros más que yo. Él llevaba una bandana en el cabello dejando caer unos cuantos rulos por su rostro y sus ojos eran increíblemente verdes, definitivamente no era lo que esperaba.
-Así que tu eres la tonta niña que debo mantener en mi casa- habló él de repente y yo fruncí el ceño.
-No soy una tonta. ¿Tu quien eres?
-Eso no te importa- él se fue acercando a mi-. Estarás dos meses aquí y quiero advertirte unas cuantas cosas ya que esta es mi casa.
-Aléjate- murmuré, él estaba bastante cerca y se me era casi imposible retroceder porque mi espalda ya chocaba contra la pared.
-Yo hago lo que yo quiero, ¿oíste?- él me miró a los ojos-. No saldrás de esta habitación y mucho menos, de esta casa. No harás ruido y fingiremos que no existes, ¿si? Si te veo en otro lugar que no sea este, te irá muy mal.
Él finalmente se separó de mí y se giró para caminar a la puerta.
-¿En donde esta mi papa?- le pregunté y él antes de salir, me miro.
-¿Tengo cara de saber eso?
Cerró la puerta fuertemente y otra vez salté del susto.
Entonces miré a mi alrededor y en la habitación tan solo había una cama, un pequeño armario y un escritorio frente a la ventana. No tenía ni idea de en donde estaba, mi celular ya no estaba en mi bolsillo y mi cuerpo no dejaba de temblar.
-El Sr. Styles me ordenó que le traiga esto- Dorothea entró a la habitación y me tendió una bandeja con comida.
-No tengo hambre- respondí.
-Me temo que tiene que comer o el Sr. Styles se enfadará- murmuró y yo me acerqué a ella para recibir la bandeja, probablemente él le gritaría o algo si no aceptaba comer.
Ella salió de la habitación y yo dejé la comida sobre el escritorio. Entonces abrí la ventana y miré abajo, tenía que haber una forma de salir de aquí. Lo procese un poco y después de unos minutos, llegué a la conclusión que saltar no sería una buena idea. Era imposible hacerlo y seguir con las piernas unidas al cuerpo.
-Sí, llegaré tarde- escuché de repente la voz del tipo de hace un rato afuera de mi habitación.
Me acerqué a la puerta sigilosamente y la abrí un poco, él estaba hablando por teléfono.
-Mierda, tengo una vida, ¿recuerdas?- él frunció el ceño y empezó a caminar-. No entiendo por qué me tienes que meter en tus putos problemas.
Él se quedó un rato en silencio.
-Llegaré en tres horas, adiós papá.- el tipo guardo su celular en su bolsillo y yo rápidamente cerré la puerta.
Entonces me dirigí al escritorio y me senté ahí. Cogí la manzana que tenía en la bandeja y mientras la comía, veía como el cielo estaba empezando a oscurecer. Era increíble, había pasado horas inconsciente y probablemente, en este momento, mi papá debía estar desesperado. Sentí como mis ojos empezaban a arder y en menos de dos segundos, ya me encontraba llorando desconsoladamente.
-Mi mamá dice que si ya terminaste de comer... ¿Te pasa algo?- miré a la puerta y el niño pequeño que debía ser el hijo de Dorothea se encontraba ahí.
-Estoy bien- limpié mis mejillas-. Aún no acabo.
Él asintió y se acercó a mi.
-¿Como te llamas?- le pregunté.
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Inside of the Beast- Harry Styles
Fanfiction"La indiferencia hace sabios, la insensibilidad...monstruos." Él creía que lo tenía todo. Ella todo lo contrario. Él era un monstruo. Y ella logró domarlo.
