Caminos

Capitulo 3

Gilberto.

Creo que esa chica eran de la que me hablaban hace unos días. Cuando llegue a mi casa me dirigí a mi habitación acostándome estaba demasiado cansado por mi partido de basquetbol, me levanté yendo al baño despojé de mi ropa metiéndome en la ducha después de 10 minutos salí con la toalla amarrada en mis caderas. Entre a mi cuarto poniéndome un pans de cuadros azules y una remera blanca, me acosté en la cama tapándome,cerré mis ojos quedándome dormido en menos de 1 minuto.
Me levanté un poco de malas ya que eran las 7 de la mañana y no me gusta levantarme un sábado por la mañana ya que los sábados eran los únicos días en que podía levantarme tarde pero no tengo que levantar temprano para ir a recoger a mi primo no me cae mal al contrario me cae súper bien es el único en quien puedo contarle mis cosas, mis sentimientos todo para ser exactamente. Aparte tenia qué pasar a ver a mi amiga Liz ya que ayer see había enfermado. Me dirigí a mi closet agarrando lo primero que viera fui al baño lavándome el rostro y los dientes agarre mis cosas saliendo de la casa, tomé un taxi para el aeropuerto esperé un buen tiempo para ver a ese tipo.

Aerolínea: Los pasajeros de España a Mexico en la línea 3, los pasajeros de España a Mexico en la línea 3

Al escuchar lo de la línea me dirigí hacia ahí, esperé máximo unos 10 minutos pero aún no llegaban ya me estaba enojando demasiado. Luego de unos 5 minutos más vi a mi primo Ernesto o como le dice Liz " Feto mal hecho" ese nombre si le queda bien y me hace reír demasiado.—Ya llego tu primo favorito–.Sonrió acercándose a mi abrazándome.–¿Como estuvo el vuelo?–.Pregunte ayudándole con las maletas mientras salíamos del aeropuerto.–Pues bien,solo que me fastidió un poco ese Niño que no se callaba–.Contesto irritado.–Jajaja ya te acostumbrarás,recuerda que tu también fuiste un niño–.Comente viéndolo.–Lo se, pero yo no fui así de fastidioso,¿o si?–.Dijo mientras entrábamos al taxi.–Bueno eso no lo sabemos, solo tu queridísima madre sabe eso–.Conteste en un tono burlón.–Eres malo conmigo Gil–.Dijo pegándome con esas manos de mantequillas con cuerpo de espagueti me eche a reír ante su golpe.

Llegamos a casa entrando en está subiendo a mi habitación.–Que recuerdos estar aquí–. Sonrió con nostalgia tumbándose en mi cama.–Oye, espagueti yo dormiré ahí tú en la hamaca–. Dije frunciéndole ceño moviéndole de la cama.–Yo no quiero dormir en la hamaca, quiero la cama–. Hizo puchero sentándose como indio cruzándose de brazos.–Ahhh–. Saque un suspiro.–Acomoda tus cosas que iremos a ver a Liz–. Dije mientras abrí su maleta.–¿Liz?, pero si ella siempre me pone apodos y me trata mal–. Alce mi mirada dirigiéndome a la de él, Acercándome que Ernesto fruncía el ceño.–Pero aun así nos quiere apúrate–. Le tire la mátela riendo saliendo de la habitación a la cocina para tomar agua.

– Vamos –. Escuche su voz irritado. No le respondí agarrando mis llaves saliendo de la casa a la de Liz en un trayecto de 15 minutos al llegar vimos a 2 chicas saliendo de la casa de Liz era un poco extraño ya que raramente nos habla de sus amigas. Saludamos a su mamá adentrándonos en su casa subiendo por las escaleras.– Hola, Liz –. Sonreí acercándome a ella sentándome a su lado mientras que él feto mal echo de Ernesto fruncía el ceño por pocos minutos luego de acercarse sentándose en la orilla de la cam.– Hola, Gilbi –. Sonreía.– Y feto mal echo –. Esta río con fuerza luego de toser.– Ves, por burlarte de mi te enfermaste –.  Ernesto sonrió con orgullo.– Mejor cállate, que te puedo hacer brujería –. Respondió con una sonrisa malévola.– Ajá –. Dijo con ironía mientras yo reía por esta escena.– Ya cálmense, ¿como te sientes? –. Pregunte quitando unos mechones de cabello de su rostro poniéndoselos en su oreja.– Pues más o menos, la fiebre se me está bajando pero la garganta empeora un poco –. Contesto.– Ya veo,¿vino tu novia? –. Pregunte viéndola.– Si –. Contesto sonriéndome.– ¿Quienes eran las 2 chicas que acaban de salir? –. Pregunto esta ves feto mal hecho .– Son unas amigas del colegio, vinieron a visitarme y se quedaron a dormir .–Conteste algo seca hacia su pregunta .– Ya veo, pero,una amiga tuya bajita se veía tiermita -. Comentó feto mal hecho formándose una sonrisa en sus labios .– Ohh, pero ya tiene un pretendiente –. Liz dijo de una manera que su auto se convirtiera tenebrosa, hasta a mi me hizo poner la piel de gallina.

         

[***]

Después de estar un buen rato con Liz, Ernesto y yo nos fuimos de su casa para ir a una plaza que tanto quería ir Ernesto al llegar al lugar Ernesto parecía un niño que corría por ahí y se perdía de mi vista con tan solo quitarle la vista por 1 segundo. Jadeaba demasiado porque corría tras de él.

《 ¿Como es posible que corra demasiado》

Me pregunté a mi mismo mientras trataba de recobrar el aliento para volver  a perseguirle. Llego un momento en el tipo se canso y estaba tirando en el piso me brío  acerqué a el como si fuera un gato sigiloso y de puntillas  .– Estoy muy cansado, Gilbe -. Se quejó el tipo mientras le ayudaba a levantarle .– ¿Porque será? –. Conteste de una manera sarcástica, le ayude a quitar el poco polvo que tenía en el trasero. Volvimos a caminar pero esta vez le puse una corre de esas que los padres le ponen a sus hijos cuando no están quietos .– Gilbe, esto es humillante –. Dijo en reproche Girón su cabeza viéndome con un puchero algo que me hizo demasiada gracia .– Es tu culpa por obligarme a ponerte esto –. Conteste en un bufido volviendo mi gusta al frente.

En que caminábamos vi de lejos a las amigas de Liz que estaban en su casa anteriormente, Nicole giró su cabeza en que nuestros ojos se encontraron ella sonrió y le devolví el gesto corrió hacia mi con su amiga agarrándole de la muñeca soltó a su amiga viendo a esta muy agitada recuperando su aliento .– Hola Gibi,¿que haces por aquí? –. Pregunto Niocole con curiosidad .– Solo estaba por aquí con mi primo Ernes... –. Iba a terminar la oración hasta ver que se había quitado la correrá fruncí el ceño .– Este tipo –. Murmuré molesto .– ¿No es él Gilbi? -. Dijo su amiga señalando hacia un punto en específico buscando con la mirada la dirección que me había dicho y efectivamente estaba en lo cierto estaba comprando helado el desgraciado .– Ahora vuelvo -. No les di unos segundos de responder porque corrí hacia mi primo agarrando sus hombros haciendo fuerza hacia que este estuviera de hincado .– Lo siento, quería un poco de helado –. Mostró el helado de queso con zarzamora luego se quejó por la fuerza que había hecho en sus hombros, saque un suspiro  volvimos con Nicole y su amiga la cual estaba linda la chica. Sus ojos eran lindos con un color café oscuro haciendo resaltar estos,  su cabello era de color negro como la noche, su piel morenita era entre pálido y me dio oscuro ni hablar de sus labios que eran medió carnosos con un rosa bajo aparte de tener una buena altura chicas como ella de seguro tendría novio .– ¿ Y tú amiga? –. Le pregunte a Nicole mirándola .– Se tuvo que ir, un amigo suyo necesita de su ayuda –. Respondí .– Ya veo, será en otra ocasión –. Sonreí .– ¿Cual es el nombre de tu amiga? –. Hice otra pregunta en que comía del helado de mi primo .– Alejandra.