capitulo 34: "te amo"

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Leonardo se encontraba descansando luego de haber almorzado con raphael, el bebé se había vuelto algo inquieto lo cúal le provocaba dolores al pobre leonardo; raphael había ido a firmar algunos papeles que necesitaba el hospital para hacerles examenes y otras cosas a leonardo, una "enfermera" entro en la habitación sin hacer ruido. Leonardo no noto nada, la "enfermera" se acerco a la bolsa de suero que estaba colgada cerca de leonardo, sacó una jeringa de su bolsillo con un remedio mucho mas fuerte y peligroso. Lo introdujo en la bolsa de suero, el cúal batio para que nadie se diera cuenta del otro medicamento, despúes de hacer su trabajo salio de la habitación tal y cual entro......en silencio.

Leonardo despertó por un fuerte dolor en su estomago, con sus manos toco su vientre deseando que nada malo le pasará al bebé. El dolor era demasiado, comenzó a gritar como si alguíen lo estuviera matando a sangre fría; unas enfermeras entraron a ver que sucedia, al ver que la situación era peligrosa llamaron al medico que lo atendía.

-leonardo, respira-hablo ayudandolo a normalizar su respiracion- ahora dime donde te duele

-e-el es-estomago-se quejó asustado

-enfermera, ponga 250 milimetros de analgesico -habló el doctor, mientras la enfermera hacía lo que el profesional decia

Cuando la enfermera inyectó el medicamento en el suero, leonardo comenzó a respirar con mayor tranquilidad. Por suerte habían podido ayudarlo a tiempo, o otra historia estarían contando una historia mucho peor.

12 horas más tarde....

Leonardo había declarado con policías, llevando a cabo un casí asesinato. El muchacho de cabello negro había contado que sintió a alguien entrar en el cuarto mientras el dormía, pero que en ese momento no pudo abrír los ojos gracias al suero. Los policias se fueron minutos despúes dispuestos a atrapar al maleante que casí le quita la vida a leonardo.

-leonardo, lamento haberme separado de ti-hablo raphael mientras tomaba las manos de leo

-no es tu culpa-habló leonardo sonriendole

-por suerte no paso a mayores-habló el doctor- si no hubieramos venido a ver el estado de leonardo, quizás hubieramos llegado tarde y lo hubieramos encontrado muerto

-no diga eso-hablo rapidamente raphael- por suerte no sucedio nada lamentable

El doctor despúes de unos segundos salió de la habitación raphael se quedo mirando a leonardo, raphael se sonrojó al ver que el pelinegro le sonreía devuelta.

-leo.....yo...

-¿sucede algo rapha?-preguntó leonardo al recordar aquel beso que se dieron.

-mira yo......-habló nervioso- despúes de que me besaste yo.....comence a sentir un calor en el pecho cada vez que te veo

-¿no estarás enfermo?-preguntó leonardo un tanto preocupado

-no, no es eso-continuo, camino hacía el y le tomo las manos- leonardo yo......me enamoré de tí.

Leonardo lo miro sorprendido, pero con ojos llenos de felicidad.

-me enamoré de tu bella sonrisa-comentó raphael- me enamoré de lo fuerte que eres al enfrentar el tema del embarazo, me enamoré al ver que no te das por vencido con nada.

-raphael yo..........-hablo leonardo buscando las palabras correctas-yo siento lo mismo por ti

Raphael sorprendido se acercó a el y lo beso en los labios tiernamente, leonardo correspondió enseguida ya que siente que si no estan juntos se perdería en la angustia.
Despúes de unos segundos se separaron ambos sonrojados a mas no poder.

-yo tambíen te amo-respondió una vez que se separaron

-entonces ¿quieres ser mi novio?-preguntó un poco apenado

-claro que si-

Raphael muy feliz beso a leonardo con mucha pasión, ahora nada le impidiría ser feliz.

Mientras tanto....

¿¿: hay que llevar a los prisioneros donde nuestro jefe

¿¿: aún no desembarcamos, desembarcaremos en media hora

¿¿: bien, iré a ver si los demás terminaron con la droga.

En la celda

trataba inutilmente de escapar, muchos de sus compañeros habían podido salie de ahí y seguramente estaban ya en tierra. El señor tomo un amambre oxidado y lo metió en el candado tratando de abrir el candado, despúes de unos minutos lo abrió siguilosamente salió de la celda en dirección a la cubierta, en donde lo esperaría un bote salvavidas para volver a tierra.

Esquivó a personas con pistolas, hasta que llegó a la cubierta en donde bajó el bote rapídamente y saltó hacía el; por el sonido del bote chocar con el mar, todo personal salió a ver que sucedia, pero cuando ellos quisieron hacer algo el señor ya estaba muy lejos.


16 minutos despúes


Sus manos estaban cansadas para seguir remando, no sabía cuanto le faltaba para llegar a tierra. Suspiro un vez para luego ver hacía la nada.



-pronto llegaré-dijo mirando hacia el mar-pronto nos volveremos a encontrar leonardo........hijo mio






Continúara.......

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