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Me estaba por quedar dormida en el sillón en medio de la peli, pero Erick me habló, temí de que se me haya caído la baba o si me quedé dormida con la boca abierta en esos 5 minutos que cerré los ojos.

-Vayamos al cuarto, si tienes sueño-me dijo y lo miré, asentí y él se paró, prendió la luz y apagó el televisor-ven-dijo y lo seguí, abrió la puerta y tenía una cama de dos plazas.

¿Había dejado la luz prendida? ¿Este chico no ahorra luz?

De repente seme fue el sueño, me senté en su cama, era suave, empecé a saltar sentada.

-Voy a apagar las luces de la sala-dijo.

Me saqué la campera, me puse cómoda, miré la foto que tenía en su mesita de luz, estaba él con un nenito, tenían los mismos ojos, después vi un dibujo, era él, abajo decía "Te amo, nunca cambies, los amo a todos, son lo mejor que nos pasó", no entendí por que después escribió en plural, lo dejé en su lugar, en la esquina de su cama había dos guitarras, una parecía vieja y otra nueva.

-Es tan cómoda esta cama-dije sentándome, me di cuenta que hablé sola, me tiré para atrás, reboté-¿Por qué sos tan suave cama?

-Mi mamá la compró por si quieres sabes-dijo Erick y me morí de la vergüenza.

Se sentó en la cama y saltó así, lo miré y él a mí, nos sonreímos , me saqué los zapatos y me paré en la cama, empecé a saltar, él me miraba riendo.

-Salta conmigo-dije riéndome.

-A mi mamá no le gusta que salte en la cama.

-Tu mamá no está acá, te vea más rebelde Erick Colon-le dije y miro a otro lado riendo-se que tienes ganas de saltar, no te quedes con las ganas, es divertido-se sacó las zapatillas-¡Si!-empezó a saltar.

17 años y saltando en la cama, lo más inmaduro que sea a mi me gustaba saltar en las camas, ojalá esto fueron un deporte.

Caímos a la cama agotados, sonó el timbre y miré a Erick.

-¿Quien será?-dijo y se paró, salió del cuarto, lo seguí, pero antes agarre una escoba que estaba ahí.

Él no se había dado cuenta que lo seguía y en el pasillo hacía la puerta se asustó al voltear.

-¿Que haces acá?-me preguntó.

-¿Quien toca la puerta a las cuatro menos diez de la madrugada?-le dije, tenía miedo, pero no me quedaría quieta.

Erick prende la luz del pasillo y abre la puerta.

-¿Si?-dijimos al ver a un señor con pijama, nos vio y agrandó los ojos.

-Es que intentaba dormir y sonaba como si se iba a caer el techo-nos dijo-Perdón por interrumpir su... solo que... ¿Pueden hacerlo más despacio? Gracias-dicho eso se fue.

Erick cerró la puerta y me miró, nos tentamos, nuestra risa no paraba, me dolía la panza, me apoyé en la pared y la luz se apagó, había aplastado el interruptor, pero seguíamos riéndonos, dejé el palo y fuimos por el pasillo.

Al llegar al cuarto, nos fuimos directo a la cama y el apagó la luz, ya no tenía sueño y sabía que él tampoco, lo miré, estaba viendo el techo, me volteé para mirarlo, y volteó la cara para verme, nuestros ojos se encontraron.

-¿Como estas?-me dijo, se que se refirió a lo de mi papá.

-Espero saber controlarme cuando hable con mi papá, solo quiero que no se hagan daño, aunque mi papá ya le está haciendo daña a mi mamá.

-Se el sustento de tu mamá.

-¿Y quien va a ser el mío si no puedo llorar para que mi mamá no se ponga mas triste?

-Yo-dijo.

-Erick, nos peleamos cada dos por tres.

-Aunque nos peleemos voy a estar para ti.

-Gracias-dije sonriendo, era tan dulce.

-Buenas noches-dijo y se volteó, me dio ganas de abrazarlo pero no quería molestarlo, bastante hizo con el que me quedara a dormir.

Le di la espalda a Erick, me dormí hasta que escuché la puerta cerrarse, habían dos personas hablando en la sala, una señora y un señor, al mismo instante pensé en que eran sus padres, Erick se dio vuelta, y me abrazo por la espalda, entrelazando nuestras piernas y me abrazó más a él, me sorprendí pero no me sentía incómoda, lo miré y estaba con los ojos cerrados, sus labios entreabiertos estaban cerca de mi, me acerqué y quise besarlo.

-¡¿Erick estará durmiendo?!-preguntó la señora, me volteé por si entraba, cerré los ojos haciéndome la dormida.

-¡Si mujer! ¡No va a estar despierto a las 5:50 de la mañana!

-Voy a ver a mi hijo igual-dijo, sentí como la puerta se abrió-¡Oye! ¡Ven! ¡Está con una chica!-casi gritaba, Erick no se despertaba, si tenía el sueño pesado.

-¡¿Que?!-dijo el señor-¿Quién es?... Es bonita.

-¡Están en la cama!-dijo gruñendo.

-¿Que tiene de malo? Sabe cuidarse.

-¡¿Que?!

-Por favor Daysi, los jóvenes tienen necesidades.

-Yo no quiero que utilicen a mi hijo.

-Yo tampoco, pero no por eso voy a desconfiar de todo-se quedaron callados, al escuchar la voz de Erick.

-¿Que hacen acá?-sentí como me tapó con las sabanas, abrí los ojos, no veía a nadie porque estaba tapada, pero veía sombras.

-Vivimos acá-dijo su papá con algo de duda.

-Ya se, pero este no es su cuarto, váyanse-los echó.

-A mi me hablas bien jovencito, además vamos a tener que hablar de esto-escuché a su mamá, en ese momento pensé en cómo me iría, era obvio que me iba a ver.

-¿No tienen sueño? Se fueron de fiesta, deben estar cansados, vayan a dormir-dijo Erick, se acostó mirando al techo, ya no me estaba abrazando, quería que lo hiciera-enserio lo digo, vayan a su cuarto.

-Vamos Daysi, hay que dejarlo solo-escuché la puerta cerrarse y Erick sacó todo el aire frustrado.

Me destapó y me acarició la mejilla, me dio un cosquilleo y abrí los ojos, el estaba mirándome.

-Perdón, sigue durmiendo-dijo, se volvió a acostar dándome la espalda, entonces lo abracé y cerré los ojos.

Estuve así por un montón de tiempo antes de dormirme profundamente, mi cabeza pensaba en cómo reaccionaría a escuchar a mi papá, varias lagrimas se me cayeron antes de dormir, agradecí de que Erick estaba dormido y pudiera abrazarlo tan fuerte sin que se diera cuenta de mi llanto.

Había una... (ERICK BRIAN COLON)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora