Epílogo

909 61 36
                                    

8 años después...

Gajeel

—Raven Tail se ha unido a Grimoire Heart y están atacando a nuestros aliados del sur. —me informa mi beta caminando de un lado a otro.

—Envía a Romeo, Jellal, Erza, Wendy, Gray y Juvia para darles apoyo. Que se mantengan en contacto con nosotros, si necesitan más personas les enviaremos más.—agarra su teléfono y empieza a dar ordenes a través de él.

Tras varios minutos tratando asuntos de la manada al fin acabamos. Natsu se sienta en la silla al otro lado del escritorio y es entonces que noto sus ojeras.

—¿Otra noche sin dormir? —pregunto con un tono de burla.

—Se me había olvidado el infierno de los dos primeros años. Aunque Nashi no fue tan inquieta por las noches como Igneel.Te envidio quédate sólo con Raven es lo mejor. Igneel llora por su leche, Nashi grita porque no la deja dormir y yo lloro porque los dos no se callan.—sin querer se me escapa una risa.

—Aún no viene lo peor. —levanta una ceja interrogante.— ¿Has pensado que vas hacer cuando Nashi encuentre su mate? Si es de otra manada se la llevará. —su cara se vuelve tan pálida como la pared.

—I-imposible. Ella es la próxima beta. Y también puede ser de esta manada, incluso pueden ser Raven.

—Quién sabe. En estos momentos me alegro de sólo tener un hijo y varón. Aunque Levy no opina igual quiere tener otro, yo antes también pero...

—Pero desde que tuvo el parto de Raven podría ser peligroso para ella. —bajo la mirada a la mesa.— Lucy me dijo que Raven va a dormir en mi casa.

—Sí, mañana cumple 5 años y vamos a prepararle la casa para su cumpleaños.

—¿¡5 años!? ¿¡Me estás vacilando!? Parece que tiene 10.

—Pedazo idiota tu hija mayor tiene 8 años y Raven nació 3 años después que ella. Igneel y Raven se llevan 3 años. Es cierto que aparenta más edad por algo es el próximo alfa. —su cara se ilumina ante mi explicación. Idiota.— Vamos a buscarlas.

Salimos del despacho de la antigua mansión en la que vivía. Bajamos hacia el parque de la ciudad. Faltan 5 m cuando la huelo. El aroma de Levy. No debería ser capaz de notarlo todavía. Entramos al parque, varios niños se tropiezan y se nos cruzan.

—Mira Natsu, alguno de estos pequeños puede ser el mate de tu hija. —comento con una sonrisa burlona en mis labios. Él sólo me dedica una mirada asesina.

—¡Nashi! —grita a todo pleno pulmón Natsu miro buscando a la pequeña demonio. Y la encuentra encima de la construcción agarrando a Raven de los pies mientras está colgado.

—¡Raven! —corremos hacia ellos. Cojo a mi pequeño entre mis brazos.— ¿Qué ha pasado? ¿Y vuestras madres?

—¡Os hemos dicho que no juguéis así! —Natsu regaña a su hija.

—Un niño empujó a Raven y yo lo agarré. Y mamá...—miramos hacia donde señala y me encuentro a mi enana siendo agarrada por Lucy mientras discute con otra madre.

—Bájame papá. Ya soy mayor. —se revuelve en mis brazos y me lo echo al hombro mientras me acerco a la fiera que tengo como esposa.— Nashi ayúdame. —siento pequeños estirones desde atrás y me imagino que Nashi está estirando de Raven pero aún no tiene suficiente fuerza.

—¡Señora déjese de tonterías y vigile a su hijo para que no mate a otros niños! —la mujer va a contestarle pero se detiene al verme y se va sin decir nada.

La luna del alfaWhere stories live. Discover now