The Strawberry Milkshake

El estacionamiento

-No puedo creer que te hayas levantado super tarde, ahora vamos a llegar tarde y no vamos a encontrar lugar en el estacionamiento por tu maldita culpa y tu alarma!.- Me dice mi amiga Meredith.

Ella siempre exagera las cosas, le gusta ser puntual y sacar buenas calificaciones ya que sus padres se lo exigen mucho. La conozco desde hace 7 años, nos conocimos en el parque, yo me caí a la laguna ya que mis padres se habían subido a una lancha y mi hermano y mi tía a otra, así que como  no quería estar en la lancha de mi hermano, intente cruzarme a la de mis padres, pero desafortunadamente yo no tenía demasiada flexibilidad en ese entonces y sip, me caí. Meredith estaba persiguiendo un pato, así que cuando el pato cayó dentro del agua, ella también. 

Nos llevaron a una cabaña, para que se secarán nuestras cosas y ahí fue donde la conocí. Mis padres y los de ella también se conocieron en ese momento, así que desde ese día estamos juntas.

- Perdóname, pero no sabía que mi teléfono no tenía batería. Desdé hace dos días se descarga muy rápido y casi ni lo uso. No sabia que se me descargaría en medio de la noche sin haberlo usado.- digo riéndome.

-Pues parece que alguien se tendrá que comprar un celular nuevo.- dice enojada.

-Pues al parecer yo no cago dinero como tú así que no se podrá cumplir tu deseo en estos meses.- digo viendo mi celular. No tenía nada de malo, tengo 3 años con el, pero sigue sirviendo.

-Sabes qué?, tengo una mejor idea, y si te compramos una alarma de esos de lego?. Suenan muy fuerte y les dura la batería, aparte tienen luz incluida.- dice volteandome a ver.

-Bueno si me lo compras con mucho gusto lo acepto.- digo riéndome.

-Buenas tardes señoritas, enséñeme su credencial por favor.- dice el vigilante de la escuela.

-Adelante.

- Ya vez, hay mucho espacio todavía.- digo volteando a ver el estacionamiento.

- Aja sí.- dice volteando los ojos.

-Estacionate ahí en la esquina, no está lejos de la puerta principal.- digo señalando el lugar libre.

-okas.

Desafortunadamente alguien vino en dirección contraría y nos arrebato el lugar. Un Ferrari rojo, con los ventanales polarizados. 

Meredith se baja del auto sacando fuego por las orejas y le empieza a gritar un montón de babosadas por el espejo, ya que la persona causante de este desafortunado incidente no había bajado. Pero cuando Meredith se dio cuenta que no bajaba la persona, le pega al coche con uno de sus tacones y deja un rayon enorme en la puerta.

Cuando la persona baja toda enojada, Meredith se quedo en blanco. Era Mike, el sub capitán de los falcons (el equipo de fútbol americano), te da miedo cuando lo vez inmediatamente , tiene ese aura igualito al de Hades, escupiendo fuego y maltratando a todos, aparte es alto y  tiene una espalda muy ancha. La parte de abajo no les mentiré porque se que no puedo hacerlo, tiene un buen trasero, pero bueno. Mike se le acerca apresuradamente, cerrando su puerta de un portazo y la acorrala contra su coche. Meredith parece como si hubiera visto un fantasma, está toda pálida y temblando.  Meredith sufrió de bullying de chica, así que tiene un trauma con los chicos y más si son así, de ese vuelo.

Me bajo rápidamente antes de que Meredith se orine en sus pantalones, pero cuando lo iba a enfrentar baja otro chico del otro lado, igualito al idiota que tengo enfrente de mi. Se pone a mi lado y me trata de agarrar de la muñeca pero yo la quito rápidamente.No tenía en mente eso.

-Que les pasa a ustedes dos par de imbeciles.- digo enojada.

-No me gusta que me digan que hacer y menos unas personas como ustedes. Llegaron tarde y se acabó. Aparte le hicieron una raya a mi puerta. Van a tener que pagarla!.- dice Mike riéndose, viendo a Meredith directamente a los ojos.