Hora de la verdad

6 0 0
                                    

- Amiga te ves arruinada. Sos como un panda con esas ojeras. -
Llegado el viernes, después de trabajar y fiel a nuestra costumbre,  estamos con Gabi en nuestra casa para la maratón de películas y comida chatarra. Desde el lunes después de recibir los mensajes no he podido dormir bien,  y además me paso los días en alerta por cualquier movimiento.  Esto de verdad me esta volviendo loca. No le dije nada a nadie porque no quiero preocuparlos, pero estoy cansada que ya no puedo con todo,  y entonces decido que es hora de decirle por lo menos a mi mejor amigo con la esperanza de que pueda traer un poco de calma a esta semana.
- No he estado durmiendo bien esta semana - arrancó a decir algo nerviosa- y es que tampoco puedo... -
Gabi al verme nerviosa se acerca a mi.
- Siendo sincero,  te he notado rara estos días pero no quise decir nada hasta que decidieras hacerlo vos,  así que decime, que esta pasando Ari?(ese era su diminutivo a mi nombre)
Suelto un suspiro y se que ya no puedo ocultarlo,  no a el.

- Te acordas cuando en año nuevo un tipo estaba molestando para que bailará con él? -  asiente y me insta a seguir- bueno, esa noche recibí un mensaje de un número desconocido pero no le di importancia, sin embargó el lunes volví a recibir más mensajes también de número desconocido mientras iba camino a la parada, y lo hubiese ignorado, pero el hecho de que en estos siempre me llamara muñeca como lo hizo el chico esa noche y que creo que estuvo en la tarde en la librería de verdad me asustó. Seguro estoy siendo paranoica al respecto y no es nada pero... - mi amigo me corta al ver que empiezo a hablar muy rápido.

-Espera espera, me estas diciendo que el mismo tipo de año nuevo te esta acosando? - veo como abre los ojos y me mira alerta.
- No estoy segura si era el ese día,  pero la forma en la que me sonrió resultó tan conocido y escalofriante que... -
- Artemisa mostrarme los mensajes. -

Supe que la cosa se jodió en el momento en que me llamó por mi nombre completo y por la forma en que ahora no mostraba más que seriedad.  El de verdad estaba alterado por esto,  y eso no ayudaba en nada a que yo dejara de estar asustada.
Agarre mi celular y abri los mensajes,  se lo pase para que leyera por su cuenta, ya los sabía de memoria.

Gabi quedó suspendido mirando la pantalla hasta que al fin reacciona, y por su mirada supe que no era bueno y que se venía un gran discurso de su parte.
- Artemisa estos mensajes no son un chiste, esto no es algo que podes ocultar de los demás,  !este tipo te siguió a la parada de colectivo!!,  estaba ahí cuando saliste de trabajar.  No podes ser tan inconsciente de dejar pasar algo como esto,  no es cualquier cosa, !te esta acosando!, es peligroso. Algo te podría haber pasado ese día, debiste llamar a la policía y no esperar días para decirle a alguien. - estaba gritando, y estaba enojado, y tal vez tenía razón, pero estaba asustada, eso era lo que menos necesitaba.

- Lose. Se que no debí ocultarlo y se que esto es algo grave pero entendé que no lo quería reconocer,  no lo quiero reconocer. - y no aguantando más, las lágrimas empezaron a salir- Esos mensajes me asustaron, todavía lo hacen. Y estoy todo el tiempo en alerta por cada persona que hay a mi alrededor. No es fácil porque me da miedo, quiero creer que esto es solo mi mente haciendo de algo pequeño demasiado grande, pero se que no es así. Y que me estés gritando no me está ayudando. - y entre llanto, el temblor de mi cuerpo y la respiración entrecortada me dejé caer de rodilla al suelo. Luego siento unos brazos en volverme y me aferró a ellos.

- Shh, no llores. No tendría que haberte gritado pero estos mensajes me asustaron un poco hasta a mi. Sos mi hermana, y el hecho de pensar que alguien te ha estado vigilando me puso en alerta. No soportaría que algo te pasará, y me preocupé. Pero esto debemos llevarlo a la policía, no podes andar sin dormir y asustada todo el tiempo.- Enseguida me enderece.
- No puedo, no quiero preocupar a mis papas por algo así, menos a mi papá en su estado, sabés que el doctor dijo que tenía que llevar una vida tranquila después del infarto,  algo así lo alteraría. Además los mensajes no han llegado mas. Capaz solo decidió hacer una broma por despecho y ya se aburrió, eso es todo.
- Ari, se que no querés preocuparlos,  y aunque quieras creer que es así,  uno tiene que ser el razonamiento entre nosotros, y esta vez ese soy yo,  y te digo que no es una simple broma. - Mi amigo me mira apenado, como si quisiera estar de acuerdo conmigo pero dándose cuenta de la realidad de la situación.
-Solo esperemos, si algún mensaje vuelve a llegar voy a la poli... - No logró terminar de hablar porque un golpe en la puerta llama nuestra atención. Ambos miramos el reloj y vemos que son las 3 de la mañana. Fruncimos las cejas y como conexión entre miradas nos paramos para ir hacia ella. Cuando estamos cerca nos lanzamos miradas para saber quien se acerca, hasta que Gabi decide hacerlo,  pero antes agarra un palo que hay debajo de la escalera para casos como estos,  lose somos dramáticos.

Una vez ahí y luego de mirar se da vuelta con cara interrogativa.
- No hay nadie.

Estoy por acercarme pero piso algo y cuando corro el pie veo un papel.  Entrañada me agachó a recogerlo y cuando lo tengo ya en mis manos todo se congela. Adelante del papel esta escrito en cursiva " MUÑECA". Cuando lo abro y leo todo vuelve, y siento que hay demasiado ruido.
-Ari que pasa?  Que dice el papel?. - me vuelvo a Gabi sabiendo que no debe ser la primera vez que me llama y entre tartamudeo logró decirlo.
-T... Te en... encon...  Encontré.-

Nos quedamos mirando el uno al otro hasta que es Gabi quien reacciona.

-Tenemos que ir a la policía, ahora.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: May 14, 2018 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Fiel ObservadorWhere stories live. Discover now