PJ necesita un sofá.

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Era la madruga de un veintiséis de mayo, PJ se encontraba ocupado dibujando los bocetos para su nuevo webtoon cuando escuchó un crujido insistente que, al parecer y si su sentido del oído no le fallaba, provenía de su único y pequeño baño. Sin muchas ganas, PJ se acercó a la puerta que contenía al posible sospechoso. Caminó apenas tres pasos y echó un vistazo veloz, con una agilidad que surgía cuando su pereza no lo abrumaba.   

Lento, lento, lento, siendo muy cuidadoso abrió la puerta de golpe y gritó con todas sus fuerzas.

-¡AAAAAAAAHHHHH!

Pero ahí no había nada, ni un alma que deseara perturbar la calma de nuestro joven amigo.

-No soy amigo de ustedes.

Oh, no sé que decir, no esperaba una respuesta de tu parte. 

-¿Te parece bien si de ahora en adelante el narrador soy yo?- preguntó PJ amablemente a la narradora. 

Ella, dudando un segundo, accedió a la petición del chico. Después de todo esta es su historia.

-Bueno, muchas gracias.- dijo PJ con una extraña sonrisa.

No hay nada que agradecer, nos veremos pronto. 

°°°

Y así es como la narradora abandonó la jugada en el primer puesto. 

Hola a todos, yo soy PJ y necesito un sofá. He pasado un día entero buscando en Amxzon el sofá perfecto, pero no hay manera de que lo encuentre, comienzo a preocuparme en serio de no ser capaz de encontrarlo. 

Hace unos días llegó a mi puerta un paquete que no había ordenado, pero de todas formas lo abrí. Era un tiburón rosa con extremidades humanas, sí, así es. El sujeto se llama Bill, tiene esposa y tres hijos, pero al parecer se perdió en alguna tienda departamental mientras buscaba una cuna y decidieron enviarlo a mi casa. Duro de creer incluso para mí.

Decidí que quiero ayudarlo, es la primera persona con la que he hablado en más de siete años, si es que le puedo llamar "persona."

En fin, necesito un sofá para Bill, el desgraciado no puede volver con su familia aún y no puedo dejar que duerma en el suelo un día más. 

Mmm, lo he encontrado. 

-¡Hey, Bill! ¿Te gusta este?- le hablo para que se acerque a la pantalla de mi ordenador. 

-Es increíble, viejo.

Mi nombre es PJ, pero eso ya lo sabes, y yo por fin encontré el sofá.

El rincón de un neonato a sus 19 años.Where stories live. Discover now