Esta historia continua y pronto se avecina una tormenta, las hermanas Liniel toman control sobre Daniel, nada mas interesante que el dominio psicológico. Conoce el amor y la pasión enlazados por una gran historia llena de emociones fuertes. Déjate s...
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Durante la cena con mi madre ella preguntaba por el día tan confuso que tuve, mientras lo hacia no pude evitar cuestionarla.
–Madre, ¿Qué quieres conseguir de todo esto? – dije dejando de comer y mirándola directamente a los ojos.
–Hijo, yo no busco nada en especial – respondió.
–Pero mamá, ¿Me enviaste a una librería solo para hacer el ridículo?.
–La verdad es que nunca buscaría algo como eso, no quisiera hacerte quedar en ridículo frente a las demás personas, solo intento ayudarte – dijo ella a las que su voz era mucho mas seria – Toda madre quiere lo mejor para sus hijos, y por nada del mundo los expondría a la burla de todos.
–De un momento a otro, delatar cosas personales a personas que no conozco, ¿No lo consideras como hacer mofa de mi?.
–Lo había pensado desde hace mucho tiempo atrás, desde el momento que empezaste a llegar con una personalidad diferente a la de costumbre, oliendo a alcohol, y creo que no puedes negarme el uso de algunas sustancias en tu cuerpo.
No creí que mi madre estaba tan atenta a mis acciones.
–Te encerrabas en tu habitación y yo solo podía pensar en cualquier idiotez que pudieses hacer – dijo ella – ¿Crees que no me preocupé por ti?.
–Lo siento mamá, se que hice mal en sumergirme en esas cosas pero no necesito de nadie para reestablecerme.
–Veo que aun no has madurado lo suficiente, creo entender que es culpa mía – continuó hablando mi madre – Hijo, sin amigos no podrás llegar a ningún lado, quiero que seas mejor de lo que soy o lo fue tu padre, quiero que él se sienta orgulloso de ti. No puedo negar que gran parte de lo que haces ahora es mi culpa, desde el día que tu padre falleció pensé que seria el fin de todo, quería morirme por perder al hombre que tanto amaba, sentía que lo había perdido todo y descuide a mis hijos solo por mi estado emocional. Pronto me di cuenta que estaba un error y no podía dejarme caer a esas altura, tenia que cuidar de ustedes dos, aunque eso significara ser padre y madre a la vez fue difícil al principio y no lo niego; pero créeme que con ustedes a mi lado todo fue posible, ¿Recuerdas la noche en la que llegaste ebrio por primera vez?.
–Si – respondí con vergüenza
–En ese instante supe que debía hacer algo por ti, debía enseñarte que el alcohol no te salvaría de la depresión, se que pase la mayor parte de mi tiempo trabajando pero ahora solo te pido que sigas mis consejos... La vida no será fácil, pero ese es el motivo por el cual aun sigo aquí a tu lado, estoy aquí para ayudarte en lo que pueda... Puedes pedirme lo que quieras, hare lo posible para conseguirlo, y ¿Sabes por qué?.. – se puso de pie mientras caminaba hacía mi abrazándome por la espalda – Porque te quiero hijo, te quiero y se que pronto estarás mejor de lo que estas ahora.
