Receta de amor en diez pasos. [LawLuWeek2018]

Día seis: Collar/Cadenas.

—Hace mucho tiempo Doflamingo mató a una persona que quería y respetaba mucho —calló por unos segundos, suspiró y continuó el relato— era su hermano menor.

Luffy se sorprendió por tal información, sus ojos se desorbitaron un poco. Después de un tiempo, frunció su ceño evidentemente molesto —y hasta cierto punto dolido—. ¿Cómo alguien podía herir sus propios lazos familiares?

Law seguía callado, apretando su boca, no dejando ningún espacio en dónde se pudiera colar un poco de ese ya casi marchito y ardiente dolor que le carcomía por dentro. La razón por la cuál había estado viviendo durante sus últimos trece años de vida.

El chico del sombrero recordó vagamente cuándo su compinche de generación le salvó de aquella guerra. Recuerdos difusos se colaban en su subconsciente, llevándolo al lado de su querido hermano mayor.

—¿Eran hermanos de sangre? —Cuestionó con un tono de voz un poco alterado.

Trafalgar conectó las deslavadas pupilas grises y asintió con lentitud.

Luffy miró al frente, cabalgando a Usshi, pensando profundamente en las conexiones de la vida. Él había perdido a su hermano en batalla y fue salvado por el sádico cirujano de la muerte, con quién había terminado en una alianza. Y, a su vez, acabaron peleando con un shichibukai, principal pilar del bajo mundo, subordinado de Kaido —a quién querían derrotar— y terminó siendo el hermano y asesino mentor de Law.

¡Qué inesperadas son las cadenas en la vida!

Regresó sus profundos ojos negros, apreció el vacío y la minúscula tristeza que trataba de ocultar en esos enigmáticos orbes.

Le sonrío una vez más con confianza. Le dedicó toda la alegría que podía en ese momento, pensó que sería lo mejor para el capitán de los piratas del corazón.