Tonos Fríos

30: Club de los corazones solitarios

Los fuegos artificiales hicieron eco en mi cabeza, los flashes brillaban en sus numerosos colores. La gente cantaba en una cuenta regresiva de diez a uno, se reproducía música y la gente ondeaba banderas y pancartas.

Desperté. Recordé ayer como un flash, el regreso de Avery, nosotros viendo la cuenta regresiva y Kathy disculpándose varias veces por dejarlo escapar. Sin duda, habíamos entrado al Año Nuevo de la peor manera posible. Pero bueno, al menos no fue tan malo y Eric Stock no apareció, eso podría haber sucedido.

Miré al final de mi cama donde Kathy roncaba suavemente, su cabello rubio por todas partes, cubriendo su cara de porcelana mientras dormía. Me negué a despertarla por mis propias razones egoístas de 'necesito alguien con quien hablar'. Además, había bebido un poco la noche anterior, así que debe haber estado tan resabiada. Miré hacia mi techo pensándo ¿Qué estaba haciendo Noah en este momento? ¿Qué estaba pensando? ¿Me extraña? ¿Estaba pensando en mí también?

No era bueno pensar en él, lo sabía. Pero cuando estás enamorado de alguien, tienden a estar allí sin importar lo que hayan hecho.

"¡Psst!".

Mi corazón se sacudió y miré hacia la puerta de mi habitación, descubriendo la cabeza de Avery mirando "¿Avery?".

"¡Shhh!" Ella frunció el ceño y colocó su dedo índice sobre sus labios, "¡Ven conmigo!".

"¿Qué? ¿Por qué?" Me senté, tirando de las sábanas de mi cama, "¿Qué quieres?".

"Dios, ¿podrías ser más ruidoso?" Avery puso los ojos en blanco, "¡Solo vístete y baja el culo!" Ella cerró rápidamente la puerta seguido por el sonido de pasos que se arrastraban por las escaleras. Me senté allí, mirando la puerta por un largo rato, pensando: ¿Qué quería ella ahora? Mi mente giraba con pensamientos locos de lo que Avery necesitaba. ¿arreglar su desastre? O incluso involucrarse en el problema en el que estaba RJ.

Levantándome, me dirigí hacia mi armario y saqué mi ropa, me alboroto el cabello para que parezca remotamente ordenado y me froto los ojos con un bostezo. Comprendí que no tenía tiempo para prepararme apropiadamente así que tomé un chicle de menta de mi mesita de noche y lo llevé a mi boca.

Eché un vistazo hacia Kathy, quien todavía dormía en silencio y me puse un poco celoso. Ese podría ser yo. Suspiré y abrí la puerta de mi habitación antes de dirigirme hacia abajo. Allí vi a Avery poniéndose los zapatos con expresión precipitada y sin aliento. Preocupado, di un paso hacia ella, "Avery-".

"¡Oh, bueno, estás listo!" Levantó la vista rápidamente mientras se ataba los cordones, "Tenemos que ir y hacer algo".

"¿Qué?" Fruncí el ceño, "Son como las siete de la mañana, ¿a dónde vas? No vas a huir de nuevo, ¿o sí?" Mis entrañas se volvieron y la miré cansado. Pero se levantó y negó con la cabeza, lamiéndose un poco los labios antes de contestar, "¡No! ¡No! ¡Solo ven!" Ella dijo.

Quería negarme, pararme allí mismo y exigir que ella me dijera qué estaba ocurriendo exactamente pero al oír el sonido de un claxon en el exterior, mi cabeza cayó hacia un lado, "¿Qué fue eso?".

"RJ", ella respondió, dirigiéndose hacia la puerta, "Escucha, no te vuelvas loco, ¿de acuerdo? Solo ven y te voy a explicar lo que está pasando cuando lleguemos allí". Ella abrió la puerta para revelar un BMW blanco con música que zumbaba suavemente desde el interior. Rj se sentó en el frente sonriendo. Mirando a Avery, negué con la cabeza, "En serio Avery. ¿Qué diablos?".

Ella solo frunció el ceño y caminó hacia el auto, "¡Anímate, es un Año Nuevo. Bebé!".

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