Introducción.

37 4 0
                                    

En mi mente podía recrear una idea de lo que había adquirido de información, y supuse que el regalo que mi esposo traía en mente era algo como juguetes, materiales nuevos para explotar el talento que nuestros hijos posiblemente traían ocultos, o inclusive alguna golosina; pero nunca imaginé algo mucho más caro y más innovador.

— ¿Hablas en serio, Raúl? —elevé mi tono de voz más de lo que esperaba, sin poder controlarlo, haciendo quizá alusión a un tono agresivo que claramente no era intencional por parte mía. Pero, no era mi culpa el reaccionar así ante tal idea que tenía este señor en mente.

A juzgar por los segundos que se tardó en contestar, supuse que de nueva cuenta se había molestado por mi actitud inesperada, y lo pude imaginar sosteniéndose el puente de la nariz con cierta exasperación hacia mi repentino cambio de humor; al final, pude comprobar que estaba en lo correcto cuando exclamó con una paciencia que parecía más bien fingida:

— Y ¿qué tiene de malo? Es un regalo que yo mismo les voy a regalar por ser tan buenos; calma tus neuronas, Victoria.

Bien. Ahora yo era la neurótica loca que sólo quiere el mal a sus hijos por no querer que se dediquen un tiempo prolongado a el teléfono, y él el padre amoroso que siempre va a quedar bien en frente de ellos.

—Además, quien va a gastar mucho dinero voy a ser yo, no tú —puede que mi repentino enojo proviniera del tono de voz que utilizó para contestar, pero no creo que fuese así. Fue su maldita contestación la que me hizo perder mis estribos, porque ¿qué diablos tenía que recalcar que quien iba a comprar los regalos era él y no yo? Me castraban sus contestaciones estúpidas.

—Ya tú sabrás qué hacer, genio —y colgué de una manera estrepitosa haciendo ver cuán enojada me encontraba por culpa de su actitud.

Muchas veces solían decir que si una pareja se amaba de verdad, el amor no tenía necesidad de desaparecer como si fuese la nada misma; pero, realmente yo ya no sabía qué creer con Raúl. Sí, lo amaba con una inmensidad y era mi prioridad en un principio, pero él se encargo de desaparecer la magia como si ésta nunca hubiera existido entre los dos. No yo.

Siempre trataba de darle un trato especial, porque era mi deber como esposa el amarlo y respetarlo hasta el fin de nuestros días, pero después del matrimonio pareciese que me casé con una parte de él, porque ahora quien conocía era otra parte de Raúl que jamás me había tocado conocer.

Las historias que pintaban finales felices en los cuentos, películas, telenovelas y libros, eran una burla para la realidad que vivía con Raúl.

Desde pequeña, el leer era una disciplina que me había inculcado mi padre, que me hizo amarla y respetar cada analogía o final que representaban las mismas. Era por él que mi propia habitación estaba repleta de estanterías de pequeño tamaño en donde guardaban joyas que atesoraba, y que amaba. Amaba leer, y amaba aún más las historias de amor. Saber que la protagonista va a ser amada por alguien a quien tanto esperó, era de ensueño, y era por ello que creía que mi realidad sería así; conocer mi príncipe azúl que lucharía por mí sabiendo que sería muy costoso, pero que le devolvería el favor amándolo hasta el fin de mi vida.

No era más que una ilusa al creer eso.

Cuando la realidad golpeó a mi pequeña burbuja de estabilidad e ignorancia, me sentí tan decepcionada y traicionada por lo que tanto adoraba. Fue un golpe tan crítico que hice lo que mejor sabía hacer: huir de ello. Volví a mi ignorancia, y quise ignorar que nunca encontraría al amor de mi vida. Quise creer, o más bien, mi mente quiso creer que si había ese alguien, y que pronto haría su aparición.

Pero se equivocó.

Nunca encontré a quien en realidad me amara, y ante eso, sólo conseguí a Raúl quien tras de suplicas y palabras, juraba y perjuraba que era el indicado. Que me amaba y nunca me dejaría sola. Le creí, pero después de tantos años de casados, no puedo creer que se había olvidado de las promesas que tanto me hacia, y me reflejó a otra persona que no conocía.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 07, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

La casa de dos pisos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora