"Castillos y Coronas " de Princesas de Porcelana

Capitulo 31

Entre un Corazón Enamorado y un Corazón Roto

Nada mejor para alguien enamorado, que un abrazo que se traduzca como: "Estoy aquí contigo y nunca te dejaré". Anónimo

Eres el "no quiero volver a saber nada de ti" que nunca podré cumplir. Anónimo

Un Corazón roto, es un Corazón que ha amado de verdad. Anónimo

"No entiendo por qué me importa tanto un hombre cuando existen tantas cosas mejores a la mano" Amy Winehouse

Una de las mejores cosas que podemos vivir como jóvenes ante un nuevo mundo de experiencias únicas y genuinas, es enamorarse a temprana edad, en donde como adolescente eso es tan sublime y especial; esas primeras mariposas en el estómago, esos nervios al mil por horas, al ver de lejos a aquella persona que tanto te atrae o gusta.

Si sé que todos algunas veces pasamos por ese momento donde experimentamos todas esas sensaciones maravillosas, pero en donde también nuestras hormonas juegan un papel de suma importancia.

Muchas princesas han experimentado que es enamorarse por primera vez, tal vez en el colegio o secundaria, donde se enamoran del típico chico popular y simpático de su generación, donde con ayuda de sus amigas comienzan a enviarles cartas de amor entre otras cosas, bueno ahora con la modernización usan el inbox de las redes sociales, así muchas mini historias de amor han empezado a través de los años, pero al igual el amor en la adolescencia algunas veces llega a hacer muy truhan, muy bromista, engañando a corazones hasta herirlos mortalmente.

Así como he dicho en los capítulos anteriores, la peor edad para tener una relación amorosa es en la pre adolescencia y Adolescencia, ya que resulta que a esa edad, aun nuestro corazón está en formación ante el nuevo mundo de experiencias , a un a esa edad, el corazón no sabe al 100% que es lo que quiere, y muchas veces caemos en el error en tomar malas decisiones a esas edades que ya cuando somos jóvenes o adultos, muchos se lamentan de haber cometido acciones que hoy pesan en su vida.

-Pero para entender este capítulo me es necesario separar dos temporadas que es estar con un corazón enamorado y estar con un corazón roto como lo llaman metafóricamente-.

La Temporada de un corazón enamorado

Un Corazón Enamorado es la fase final de una decisión de entregar tu vida, alma y mente a una sola persona, pero como antecedente a esto, quiero separar estas tres fases: El Gustar o atracción, el querer y el amar.

El gustar o atracción hacia una persona es solamente una curiosidad que sientes ante un ser de quererla conocer más, pueda ser solo el gustar o atracción de su forma de vestir, su altura, su voz, su talento, su inteligencia etc, pero ese sentir tiene un límite y fecha de caducidad, ya que se puede presentar otra persona con mejores cualidades que la primera y automáticamente esa atención se dirige a la nueva persona.

En el amor esta es la primera fase donde la mayoría de las veces esta curiosidad o atracción de saber más de esa persona es correspondido por ambos corazones otras veces no lo es así. Pero esta no demuestra una exclusividad como tal si no solo un deseo pasajero.

La segunda fase es el querer, ya después de conocerse bien ambos se llegan a tener una cierta estima, donde ambos se cuidan y protegen, ya se sienten cómodos con esa persona, ya comienzas a abrir las puertas de tu castillo (Corazón) a él o ella, tu confianza se cimienta en su corazón y así correspondidamente, pero al igual este sentir puede llegar a tener límites y fecha de expiración, pero con la diferencia del gustar que termina a causa de otra atracción y el querer se termina o congela cuando se deje de valorar mutuamente o mejor dicho cuando una parte le resta importancia al otro corazón.