Padres Dementes [ChanBaek/KasBaek Mpreg]

🔫Capítulo dos

🍷🔫💰

BaekHyun no sabía muy bien a dónde ir, el llanto de su bebé y el claxon de los autos al no poder avanzar en la carretera donde estaba manejando no le dejaban pensar y mucho menos con la voz de su esposo Chanyeol diciéndole que se había acostado con su ex anoche. Llevó una de sus manos a pasar por toda su cara mientras la otra aún permanecía en el volante de su Buggati Chiron color negro, encontrando la forma de estacionarse lo más cerca que se pueda para poder pensar mejor y tranquilizar al pequeño TaeByul.

Los autos avanzaron al igual que BaekHyun, yéndose hacia la izquierda donde las calles estaban más despejadas que en el centro y en el primer espacio que vieron sus ojos comenzó a estacionarse lo más rápido que podía. Suspiró cuando apagó el motor y apoyó por un par de segundos su cabeza en el volante para poder tranquilizarse, pues desde que salió de la casa las ganas de llorar le invadieron por completo, estando un poco orgulloso de no haberlo hecho delante de Chanyeol. Inclusive le habían dado más ganas de llorar por la forma en la que le había apuntado a su esposo con su arma, pues nunca en su vida lo trató de esa manera más que la primera vez que se conocieron de casualidad. 

Despegó sus pensamientos de su cabeza por un momento y le sonrió a su hijo TaeByul que ha estado llorando desde que salieron de casa. BaekHyun lo tomó entre sus brazos doblando su cuerpo hasta el asiento trasero, donde se encontraba su pequeño de dos años.

  — Yah cariño, ya pasó— Le dijo cuando ya lo tenía en sus brazos, teniendo cuidado de que no se sintiera incómodo con el volante y empezó a acariciarlo de su cabecita y su espalda para que parara de llorar— No llores amor, no pasa nada.  

TaeByul poco a poco dejaba de llorar hasta que su carita quedó seca cuando las manos de Baek se encargaron de limpiarlo, viendo que sólo quedaron sus ojitos y nariz roja a causa de lo anterior. Siguió dándole suaves caricias mientras lo acurrucaba en su pecho y aprovechando en pensar mejor las cosas. Las ganas de llorar volvieron y sin poder evitarlo, lo hizo. Byun dejó caer cada una de sus lágrimas con dolor y decepción desahogando todo lo que tenía en su pecho, haciéndose un llanto silencioso y capaz de liberar la tristeza que siente con todo lo que le está sucediendo. 

Amaba tanto a Chanyeol que el haberlo escuchado diciendo que le fue infiel fue el último vaso que se necesitaba derramar para que todo se viniera boca abajo con sus esperanzas, con la buena vida que habían formado mucho antes de todas esas discusiones sin sentido y las peleas constantes que se daban el uno al otro. BaekHyun deseaba ser la familia de antes, una en la que sólo existían ellos tres sin ningún tipo de engaños, secretos, con buenos diálogos, acuerdos y una gran comunicación de pareja que los llevó a tener un gran y lindo matrimonio y noviazgo desde sus principios. Ni siquiera recuerda cómo empezó a hacerse un hábito todo aquello pero gracias a eso, ahora estaban a punto de divorciarse. 

Baek, por más que pensaba en qué había fallado como esposo, nada se le vino a la mente. Chanyeol ha tenido la culpa de todo por haberse endeudado, por encontrarse cansado cuando llegaba a casa sin medir las palabras que le dirigía al pelinegro o las discusiones que formaban por no avisarle que no llegaría a dormir esa noche por estar jugando. También por mantenerlo en secreto, por engañarlo varias veces a pesar de que estaba borracho y por no cumplir con las promesas que le juraba. 

BaekHyun se sentía tan fatal.

Él era alguien orgulloso, fuerte de carácter y firme en su aspecto cuando se lo proponía; y por más que amara a Chanyeol con toda su alma, no podía volverlo a perdonar así como si nada y mucho menos por un acto tan grave como lo era el acostarse con alguien más, peor si era una ex novia. El hecho de pedirle divorcio fue la decisión más difícil y dolorosa que jamás ha tomado en su vida, porque él no quería eso, era obvio que ninguno de los dos quería separarse del otro; pero BaekHyun estaba cansado, harto de las actitudes del peligris que poco a poco comenzaba a tolerarlo menos.