-Lo que sea, ya te dije que me gusta todo. -dijo ella, respondiendo a una pregunta que le hizo YoonGi-
-De acuerdo. Desayunaremos... Dejame a mí.
Este comenzó a preparar el desayuno, termino haciendo un plato que nunca probé, pero, se veía bien.
-Definitivamente, me enamoré de este plato. -dijo Sun-
-No puedo creer que nunca lo hayas probado.
-Querido, vivo de ramen, ¿que esperabas? -dijo riendo-
-¿Solo comes ramen? -preguntó sorprendido-
-No, tonto. También como otras cosas.
Así pasaron toda la tarde hablando. Tanto, que ya eran las 9 de la noche.
-Bueno. Creo que ya es hora de irme.
-Okay, vamos, te llevo, y no quiero un no por respuesta.
Ella sin más, aceptó. Al subir al auto seguían hablando, estaban planeando salir mañana.
-De acuerdo, llegamos.
-Gracias, YoonGi. De verdad. -le sonrió, a lo que él le devolvió el gesto-
De un momento a otro, el susodicho estampó sus labios sobre ella uniéndolos en un tierno beso.
Al principio ella se quedó inmóvil con los ojos abiertos. Luego de unos segundos, se lo correspondió.