¡YoonGi, el Bebé!

S E G U N D O

YoonGi estaba desesperado.

Habían pasado tres semanas desde que nada de nada con JiMin.

Nada. De. Nada.

Ni siquiera dormían juntos, pues JiMin sabía que su marido era capaz de cualquier cosa por un poca de verry hot sex.

JiMin ni si quiera sabia que era eso(La escritora tampoco), pues YoonGi lo había oído en un programa mexicano, de un peloncito que tenia una esposa muy sexy, y tenían 5 hijos. Era muy raro y JiMin no entendía nada, pues estaba en español.

Su esposo era raro.

Volviendo a lo del principio YoonGi no sabia que hacer, ya había pensado en que hacer, pero no se le ocurría nada que le disgustara a su hombre-mujer.

Le gustaba hacer de comer, lavar la ropa, barrer, trapear, atenderlos, etcétera, no sabia de al que le hiciera feos.

Todo una ama de casa.

En cuanto a JiMin, si queria estar con su esposo, queria que ... Eh... Ya saben, pero no sin manipularlo un poco y hacer que le heche la mano en la casa con una cosita. Lo único que odiaba.

Lavar los platos.

Así que, empezaría con su juego.

—Yoonie~- Dijo, llamando la atención de su esposo, quien lo vio del otro lado de la mesa, queriendo saltarle encima y hacerle lo que no le pudo en tres semanas.

—¿Si, mi cielo?.- respondio, con sierto decespero al menor.

—La niña esta dormida...

—Ajam.

—¿y que cres...?

—¿Que, amor?

—Puede que te levante castigo.-dice pícaro, guiñándole un ojo a su esposo.

—¿Que estamos haciendo aquí entonces?.- Él mayor se levanta de su lugar y va donde JiMin para tomarlo de las caderas y levantarle para besarle con lujuria.

Durante el beso, YoonGi levanto a JiMin de los muslos y este, para no caer, enrrolló las piernas en la cintura del otro.

Pero JiMin tenia otros planes.

Hizo que YoonGi se pusiera caliente con El beso, para después, llevar a cabo su plan.

—YoonGi... ahh- suspiro, pues los besos bajaron hasta su cuello y clavículas, le Gustaba mucho que le mimasen en ese lugar, pero se resistió- Amor, y-yo te dije puede que te levante El castigo , no que te lo levanté.

Jimin desenrollo las piernas y Yoongi, por un empujón del menor, se separo de el.

Pero estaba tan cachondo que no le importaba dejar su orgullo al lado.

Le rogó.

—DIOS, JIMIN, POR FAVOR ¿QUE CHINGADOS TENGO QUE HACER PARA QUE ME DEJES POR LO MENOS METERTE LA PUN...?

—Lavar los platos, cariño.

Y se fue.

Y así fue como YoonGi término lavando los trastes, asqueado por los pedasitos de comida que tocaban su piel, casi vomitando cuando se los encontraba.

Todo lo que tiene que hacer por El culo de JiMin.

Odioo lavar trastes 😣😣😣😣