Princesa Ana y Mia

El comienzo y el nuevo comienzo

  Tenia 16 años recién cumplidos y era el cumpleaños de mi padre cuando decidí dejar de comer. Por alguna razón, me acuerdo claramente de ese día.

Tengo que aclarar que mi padre nunca fue un buen padre, mi madre y el se divorciaron cuando yo tenia cinco o seis años, ya no recuerdo. A pesar que el nunca estaba presente (hace unos años me entere que mi madre lo obligaba a visitarnos las pocas veces que lo hacia) yo lo adoraba y de chiquita lo había hecho aún más. Pero ese año, el que cumplí los dieciséis, algo cambio, no estoy segura si madure y deje de estar ciega o que onda pero lo que paso es que me fui dando cuenta que mi padre no era la persona que yo siempre quise creer que era.
El me quería y supongo que sigue haciéndolo, pero no lo sabe expresar y me hizo mucho daño que espero que no haya sido consciente.
Ese día, el de su cumpleaños, mi hermano y yo estábamos en su casa para almorzar. Mi padre hizo un comentario que me desagrado y por primera vez lo mire con decepción y desprecio. Lo observe y observe la comida que había sobre la mesa a la vez que me jure nunca parecerme ni física (es obeso creo que por problemas médicos) ni mentalmente.
Ese fue el segundo en que empezó mi enemistad con la comida.

En mi liceo había una chica con anorexia y no necesite de mucho para seguir sus pasos, era la hermana de una de mis mejores amigas y ella siempre contaba lo que hacia. Fui recopilando los tips que inconscientemente me daba y de a poco deje de comer.
No fue instantáneo, pero fue rápido y los meses que menos me costo hacerlo.
Mi cuerpo nunca había sido de mi agrado e ir a la playa siempre había sido un sufrimiento por lo que tampoco me costo convencerme de que estaba gordisima aunque ahora se que no lo estaba tanto.
Pero el dejar de comer tuvo sus consecuencias, y unas grandes. Estaba débil por lo que me costaba concentrarme para estudiar cosa que siempre fue mega importante para mi. Chica doce (en mi país se puntúa sobre doce no sobre diez). Lo que produjo un decaimiento en mi estado anímico, claro que no voy a culpar solo a las notas por esto, pero fue la gota que colmó el vaso.
Cinco meses después de la decisión que cambio mi vida para siempre comencé a cortarme, algo que antes había dicho que nunca haría. Pero para ese tiempo yo ya no era yo. La Alanna de antes no estaba. Después de esto mi vida fue en picada, muy en picada. En esta entrada no voy a entrar en detalles de mi historia con la depresión pero pronto lo haré.

En meses baje mucho peso y llegue al peso mínimo clinicamente correcto (43 kg para mis 154cm) el cual no me parecía suficiente. Admito que me sentía mucho mejor con ese peso, que me sentía mas linda y ese sentimiento lo incrementaba que los chicos habían empezado a fijarse en mi. Pero seguía sin ser suficiente, seguía habiendo grasa y rollitos por todos lados. Mi dieta se puso mas extricta pero no llegue nunca a bajar mas de ahí porque pronto vino mi primer internación por depresión donde me oligaban a comer. Cuando salí había engordado dos kilos, era el infierno. Me fue imposible encontrarme de nuevo con Ana, esta vez era mega difícil por lo que recurrí a Mia por primera vez, quien en tres años no salio de mi vida.
Llegue a vomitar diez veces por día en mi peor época pero eso no impidió que engordara gracias a los medicamentos de la depresión y los atracones que me daba. 63 kg es mi peso de la vergüenza,el que no soporto ni nombrar del asco que me da y al que llegue alguna vez. Cuatro o cinco años luego todo "acabo" la depresión se había ido gracias a tratamientos psicológicos y psiquiátricos y los problemas alimenticios parecían haberse ido. Pero, ¿les digo algo? nunca se van del todo. Vos simplemente aprendes a vivir con ellos y a no caer en sus garras. ¿Les digo otra cosa? Volví a caer en sus garras después de dos años. Me corrijo, quiero volver a caer en sus garras. Suena mal y mi mente que se supone que ahora esta bien me dice que realmente esta mal. Pero ya no quiero lo de antes, no quiero ser un palo quiero adelgazar hasta sentirme bien conmigo de nuevo. Tengo una meta sana la cual no voy a permitir que siga bajando, como antes.
Voy a ir contando como me va en esta nueva etapa, por ahora, esta siento muy difícil volver a comer menos, a dejar las malditas azucares y grasas adictivas. Pero voy a llegar a mi meta de los 45 kg, solo son 9 kg menos. Debería poder.
Gracias por leerme príncipes y princesas, suerte con sus metas y díganle fuck a la sociedad <3  

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