Inocente envuelta en oro

Cap.34 Los ojos de la bestia.

Cap.34 Los ojos de la bestia.

La posición de Kagome era muy complicada ya que no le permitía ver a su atacante.Sintió como la llevaba hacia alguna parte de la habitación,hasta que su cuerpo chocó contra la puerta de la misma.
El sujeto comenzó a deslizar la mano, con la cual la había aprisionado,por todo su cuerpo.
Por más pánico que tuviera, esas simples caricias hacían estragos en ella.Cerrando los ojos pero sin dejar de luchar,la azabache disfrutaba de esos mimos.
De un momento a otro las caricias pararon y éste en la oscuridad la volteó para que lo pueda ver.Sus miradas conectaron en la oscuridad.Esa mirada hipnotizante logró que ella dejará de pelear y sólo se concentre en grabar cada detalle de ésta.
El cuerpo de la ojiazul estaba ardiendo,quería creer que de cólera pero no era así,éste estaba reaccionando a su cercanía,a su contacto.

El hombre al ver que ella iba a reaccionar tomó sus manos y las colocó por encima de su cabeza.

- Qué esta haciendo??-dijo casi sin voz.

-....

-Suélteme,no tiene nada que hacer aquí.

-A caso te molesta esto?.-dijo deslizando una de sus manos por su brazo lentamente,quemando cada zona que tocaba.

- No siga.

-...

- Que busca con esto?

-Sólo reclamar lo que es mío.Lo que me pertenece.

-Yo no soy suya.-reclamó tratando de soltarse.

- Si no lo fueras no reaccionarias así a mi.

-Déjese de juegos señor Sesshomaru.-dijo furiosa.

- Eso es.Ahora sabes quién manda aquí pequeña.

La alzó como si nada llevándola a la cama.La colocó en ella y se subió arriba de la azabache para que no escapara,tomó nuevamente sus manos pero está vez atándolas con un prenda,que nunca supo de donde la sacó.
Ella trato de luchar contra el agarre pero nada.Sus manos no podían ser liberadas.
Enfocó su vista a su opresor y lo vió mirándola descaradamente,esos ojos dorados,tan fríos como el hielo,está vez demostraban calor.Ese hermoso ámbar prometía una noche más ardiente que el mismo infierno.Maldita sea ese hombre,su extraordinario cuerpo,su exótica belleza y su mirada hipnotizante.
Con sólo sentir su mirada su cuerpo temblaba de deseo,estaba mojada y lista para él.

- Se.. Sesshomaru..nos pueden escuchar tus padres.

Él sin importar las palabras de ella,le dedicó un lento y tortuoso espectáculo despojándose de sus prendas,las cuales sólo eran una remera y su pantalón.

Maldito Dios griego que sólo llevaba eso.Cuándo se quitó el pantalón tuvo una vista perfecta de su gran y potente erección.Su calor aumento más;sin decir que su intimidad palpitaba de anticipación.

- No.. nos pueden escuchar. -volvió a tartamudear la ojiazul.

- Entonces deberás controlar tus gemidos pequeña-sonrió de lado-porque no pienso contenerme.

A Kagome ya no le quedaron más defensas para luchar,su mente se nubló completamente,dejando de funcionar.
Sus miradas volvieron a conectarse para luego desatar un apasionado beso.
Sin esperar a más el peliplata bajo sus besos a su cuello dando pequeñas mordidas en él. Sus manos siguieron su recorrido hacia el centro de ella,encontrando ahí su más maravilloso botón.
Ella sólo luchaba por no gritar,pero le estaba costando demasiado y más cuando el ojidorado metió un dedo en ella.

-Sessh..

-Ahh no querrás que todos sepan lo que estamos haciendo o Si?.

Al decir eso ella volvió a tener conciencia.Era cierto,él no quería que lo vieran con ella,se lo había dicho antes,no era digna de él.

- No me gusta que me interrumpan.-aclaró Sesshomaru antes de que ella diga algo-y no pienso parar por nada ni nadie.

Volvió a besarla y a mover sus dedos.La azabache nuevamente se perdió en el placer.

Las ansias de estar dentro de ella pudieron más,así que sin esperar nada Sesshomaru se posicionó entre sus piernas y se hundió lo más profundo en ella.
Si era tal cual lo recordaba,estrecha,caliente,era el mismo cielo.
Siguió su vaivén una y otra vez.Aumentando más las retocadas y la fuerza.

Ella no paraba de gemir su nombre y eso lo hacia sentirse orgulloso.
Desató sus manos y enseguida Kagome las llevó a la espalda de Sesshomaru dejando grandes marcas provocadas por sus uñas.
Él la cambio de posición poniéndola sobre sus manos y rodillas.Asi volvió a penetrarla con fuerza mandando una descarga de electricidad a todo su cuerpo.
Sus movimientos se aceleraron más y más hasta enviarlos a ambos al mismo clímax,en ese momento segado por la pasión el ojidorado mordió el cuello de ella dejando una pequeña marca.
Así ambos cayeron exhaustos esa noche.Aunque siguieron toda la noche,ya que cierto platinado no podía resistirse a hacerla suya.

A la mañana siguiente Kagome se levantó y miró que del otro lado de su cama estaba vacía.
Su mente le recriminaba una y otra vez.Qué esperaba??que el Dios del hielo se quedará con ella.Si claro como no.
Cuando estaba por levantarse tocaron la puerta,rápidamente se puso el camisón y abrió.

-Disculpe señorita pero el señor Sesshomaru pidió que le trajeran su desayuno.

Kagome no sabía que contestar,así que simplemente asintió,la empleada colocó el desayuno en la mesita de noche que tenía y se retiró.

La azabache vió una nota en la mesita así que la tomó en seguida.Al leerla sus colores subieron y su calor también.Necesitaba una ducha y la necesitaba ya.

Nota:
Es mejor que desayunes.Lo necesitarás para está noche.

                           S.T

Kagome entró al baño inmediatamente.El desayuno podría esperar.

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-Ya no hay más tiempo,mañana como sea la quiero aquí conmigo entendieron??.

- Si señor.

- Si fallas como lo hizo esa inútil de Yuka ,sabes cuáles serán las consecuencias verdad.

- Por supuesto señor-dijo el hombre con enojo.

-Puedes retirarte Hiten.

El muchacho salió enojado de ese.lugar.Estaba arriesgandose al salir,pero tenía que hacerlo,por ella,dijo mirando una foto.

Espero que les haya gustado.Muchisimos besos y gracias por leer.😙😚Me encantaron sus palabras,el cariño es mutuo.