Una de las tantas cosas que Yoongi amaba de Jimin era que aquellas manitos tan pequeñitas se aferraran a él con necesidad cuando juntos compartían momentos íntimos. Pues como toda pareja ellos disfrutaban de estar solos en la cama, escondidos bajo las sábanas y besándose como nunca lo habían hecho.
Jimin era como un lindo y precioso bebé pero cuando de momentos íntimos se hablaba cambiaba completamente. Aunque no dejaba su tono tan agudo y dulce a la hora de gemir suavemente en su oído. Y aquello le encantaba, le encantaba ser el primero y el único chico en escuchar su dulce voz de esa manera.
Esa noche el castaño de manitos pequeñas tenía mucho miedo pues una tormenta había llegado a la ciudad y por eso había viento y muchos relámpagos. El mayor sabía su temor por las tormentas así que no dudó en abrazarlo cálidamente y besarlo con dulzura, pero no supieron en que momento unos cortos besitos llevaron a un beso más profundo y caricias en el cuerpo del otro.
—Hyung~ — soltó con levedad el menor llevando sus pequeñas manitas a la espalda de su novio, abrazándose a él mientras unos delgados labios recorrían su cuello en suaves besitos que erizaban su piel. Aquellos labios besaban todo su cuerpo con amor y con mucha paciencia.
Mientras abrazaba las caderas del mayor con sus piernas cerro fuertemente sus ojos enterrando sus cortas uñitas en aquella ancha espalda, importándole poco si es que dejaba alguna marca ya que su mayor estaba acostumbrado.
Con unos dulces besos más durmieron agotados después de terminar su acto de amor. Jimin estaba sonrojado porque su novio no había soltado sus manitos nunca, se notaba claramente la obsesión del mayor por ellas y el no decía absolutamente nada pero en el fondo si que amaba aquello e incluso le parecía tierno.
Cuando despertó no se encontró a su novio a su lado, grata sorpresa se llevó cuando lo encontró en la cocina preparando dos cafés, pero no fue aquello lo que lo sorprendió si no que fueron leves marcas en su blanca piel de la espalda lo que lo sonrojaron por completo.
Pero a Yoongi no le importaba después de todo amaba las pequeñas y gorditas manitos que se encargaban de ser más traviesas de vez en cuando.
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(SE NOS VIENE EL COMEBACK EN AGOSTO.)
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