Nota: Lo que esta entre *–*–*–*–*–*–* Es el pasado
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P.O.V Astrid
Caminaba por los largos pasillos del colegio. Últimamente tenía sueños raros: un baile, un castillo, un chico. Lo extraño era que sentía como si en verdad estuviera en aquella época. Yo era una princesa y bailaba una bella danza junto con un joven príncipe; su cabello era castaño y tenía unos ojos tan verdes como el bosque.
Iba tan pensativa que no me di cuenta que ya estaba en los jardines. Caminaba cuando sentí una punzada en mi corazón, me sentí desesperada sin saber por qué, como si algo o alguien se pudiera ir... ¿otra vez? No entendía lo que me estaba pasando, pero después todo esto paró ya que sentí la necesidad de voltear hacia aquel árbol. Y lo vi.
Ahí estaba. Literalmente, el chico de mis sueños. Se encontraba sentado entre las raíce, leyendo algo que no identifiqué. Así que, sin ser apenas consciente, como si el viento me llevara, me dirigí hacia él.
P.O.V Hiccup
Nuevamente ese sueño. Un Castillo, un baile y una chica rubia de ojos tan azules que el cielo se quedarían corto con lo hermosos y brillantes que eran. No lo entendía y era difícil de explicar, pero no era la primera vez que lo tenía. Aunque esta vez fue diferente; esta vez, en serio pensé que estaba ahí, danzando con aquella chica, en un palacio y al compás de una bella melodía.
Me encontraba bastante pensativo así que salí a tomar un poco de aire ya que desde la mañana sentía como si algo se me clavase muy fuertemente en el pecho, hasta doler.
Vi la sombra de aquel árbol y me dispuse a leer un poco a ver si aquella molestia se me pasaba aunque fuese un poco. Me concentré un poco hasta que sentí que ese dolor se intensificaba más. Cerré mis ojos con fuerza y una sensación de vacío llegó. De pronto, me sentía observado, así que busqué con la mirada y, de pronto, la vi. La rubia que invadía mis sueños estaba parada a unos cuantos metros de mí. Como si fuera un robot, me paré y caminé hacia donde ella estaba.
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Astrid era la princesa del pueblo de Berk. Como era normal en aquella epoca, sus padres organizaron un baile para que los príncipes de los otros pueblos vinieran, conocieran a Astrid y ver así si alguno de ellos quería tomar su mano en matrimonio para formar nuevas alianzas.
Astrid estaba muy preocupada pues sus padres eran tan necios que no cancelarían nada, aunque ella varias veces les dijo que ya había un príncipe con el que se quería casar y del que estaba completamente enamorada. Sin embargo, nunca les había dicho ni nombre ni apellido de aquel príncipe y es por eso que no la creían. Astrid, por su parte, sabía que el amor con aquel príncipe estaba mal y que sus padres, los de ambos, no lo tomarían nada bien.
Verán, Astrid era miembro de los Hofferson, una familia guerrera pero muy gentil y buena con su gente; y aquel príncipe era nada más y nada menos que Hiccup Haddock. En su tribu también eran guerreros. Los Hofferson y los Haddock vivían en constante conflicto, ya que ambas familias eran tan necias que ninguna cedería hasta ver hundida a su contrincante. En especial los Hofferson, ya que odiaban perder y no perderían con una familia tan vil como lo eran los Haddock.
