CAPÍTULO 35

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PoV Donghae

— ¡HyukJae! ¡Por favor escúchame!— le supliqué

— ¿Qué te escuche?— rió amargamente — ¿No te basta haberme mentido estos últimos tres meses?— mi llanto no cesaba —O ¿qué? ¿Me vas a decir que la apuesta era un juego? ¿Una broma?— volvió a reír y sentí miedo. — ¡Claro! ¡Ya sé! ¡Te enamoraste de mí! Y renunciaste a la apuesta ¡Claro! ¡Qué estúpido que eres HyukJae! ¡No puedo entender lo mucho que me amas Donghae!

—Solo por fa…

— ¿Pero sabes qué es lo peor?— se acercó a mí solo cerré los ojos, me dolía tanto que me hablara así. A pesar de merecerlo. —Lo peor es que yo sabía cómo eras y no me equivoqué— negó con la cabeza —Me equivoqué al creerte, al creerte que sentías algo por mí, al creerte que apreciabas a mis hermanos, al creerte esos besos, abrazos y caricias— miré sus ojos estaban llenos de coraje y de lágrimas.

—HyukJae n-no es así... —las lágrimas me superaron, no podía hablar ni ver bien debido a que tenía los ojos empapados.

*

PoV HyukJae

—Como te has de haber reído de mí con el idiota de Kyuhyun— le había mostrado otra parte de mí que nadie conocía, me había entregado a él sin careta pensando que él lo había hecho también pero solo había sido un juego, solo su diversión. —Lee Donghae me arrepiento de todo lo que dije— caminé hacia mi auto y abrí la puerta —Me arrepiento de todo—  enfaticé —De todo lo que paso entre nosotros. Desearía nunca haberte conocido.

Subí al auto y aceleré haciendo rechinar las llantas. No sé qué era, no sé si era tristeza, enojo o decepción. Tal vez un poco de las tres o más bien un 100% de cada una. Desde el espejo  lo vi intentar seguirme a pie, pero lo ignoré. No más Lee Donghae en mi vida.

Minho iba a pasar por Jisung y Sora. Los cuidaría en casa hasta que Donghae y yo llegáramos. Cosa que no pasaría. Donghae regresaría a su casa, o a la de Kyuhyun ... Cómo sea no me importa a dónde demonios vaya, solo lo quiero lejos de mí.

— ¿Por qué tan temprano? — preguntó levantándose del sillón.

—Que te importa— dije de mala gana, no estaba de humor.

—Una daga, una daga en mi corazón— se burló —Lee  gruñón HyukJae ha vuelto— dijo antes de salir por la puerta.

Me deje caer en el sillón, sentía un horrible dolor en el pecho. Como podía haber sido tan estúpido como para enamorarme de él. Había logrado por completo su propósito: Enamorarme y Destrozarme.

Todas las veces que al inicio me decía 'Me las voy a cobrar todas Eunhyuk ahora lo cumplía. Si ese día en el partido no lo hubiera seguido a casa y no le hubiera confesado nada, esto no estaría pasándome. Realmente me arrepiento de todo.

El sonido de la puerta de un auto cerrarse me sacó de mis pensamientos. Rápido me puse de pie y prácticamente corrí a la ventana de la sala e hice a un lado la cortina.

Traía los zapatos en la mano, su cabello completamente desordenado por el aire y su maquillaje corrido por las lágrimas. Que ganas de correr a él abrazarlo, besarlo y hacerlo mío una y otra vez… Pero él nunca fue mío. Solo fingía serlo.

Volteó hacia la casa y después se recargó en su auto cubriendo su rostro, lloraba.

Cerré la cortina y apagué la luz de la sala para subir a mi habitación.

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— ¿HyukJae? HyukJae... ¡Despierta! ¿HyukJae?- unos golpes en mi mejilla me hicieron abrir los ojos sorprendido.

Me, MySelf and IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora