18.Soy mujeriego, pero no salgo con todas

2.3K 95 1
                                    

Mis padres me llevaron a la escuela junto con Brad y mis amigos. Mis amigos bajaron de la camioneta cuando estábamos estacionados y yo me acomodaba la mochila.

-Que tengas un lindo día cariño- dijo mi madre.

-Los veo después.

Salí de la camioneta y con mis amigos entramos a la escuela. En la primera hora me tocaba con Frederick.

Buena forma de empezar el día.

Entré a la clase. Aún era temprano y faltaban veinte minutos para que llegara Frederick. Una rubia (de esas que se les nota desde lejos que están operadas) se me acercó y se sentó en mis piernas.

-Hola Will, vi que llegaste en una camioneta con tus amigos y no ibas conduciendo, ¿quiénes eran?

-Mis padres.

-¿Eso significa que hoy no podré ir a tu casa?

Desabrochó uno de mis botones de mi camisa.

-Si quieren puedes estar en mi casa -dijo Kayden-, mis padres y yo vamos a salir.

-No podría llegar a tu casa así nada mas- dije.

-Tranquilo, los amigos se hacen favores y tú y yo somos amigos.

Agarré la barbilla de la chica, la acerqué, la besé y me separé.

-Nos vemos después linda.

Se paró y se fue a sentar en unos lugares del frente.

-Quiero detalles- dijo Kayden.

-Los tendrás después de que me divierta con la rubia.

Kayden estaba sentado a mi lado derecho, Adrian la izquierdo y Angus estaba en los asientos del frente. Los alumnos empezaron a llegar conforme pasaron los minutos y después llegó Frederick con su apariencia aburrida de maestro que aspira a tener una cita con una chica en un videojuego por internet. Hoy no iba a hacer nada para que me mandaran a dirección e iba a poner atención a sus clases que en lo particular no me importaban.

***

Ya era de irnos, Brad y Shanna se fueron con los padres de Brad, Adrian se fue con Angus (no sé a dónde -y obviamente fue Kaylee-), Kayden me dio una copia de las llaves de su casa (demasiada confianza de su parte -aunque no es que fuera a hacerle algo-), Kayden le dijo a la rubia dónde vivía y quedamos que nos veríamos a las siete, estaba esperando a mis padres.

Vi su camioneta, caminé, me subí a la camioneta y me senté en la parte trasera. Mis padres se veían bastante serios y pensé que tal vez estarían estresados.

***

Acabábamos de terminar de comer y ninguno se paraba de la mesa (excepto mi madre que lavó los trastes y limpió la mesa).

-¿No tienes algo que decirnos?- Preguntó mi padre.

-No, ¿ocurre algo?

-Sucede que cuando estábamos esperándote llegaron unas chicas y muchas decían que eran tus novias o que habían salido contigo.

-¿Qué? No puedo creer que piensen eso de mí. Nunca he tenido una novia. Hay muchas chicas que quieren conmigo, pero eso no significa que salga con ellas o algo parecido.

-Me gustaría saber que al menos tomas a una chica en serio.

Me paré de la mesa, caminé, llegué hasta mi cuarto, abrí la puerta y me tiré en la cama.

***

Desperté por la estúpida alarma de mi celular. De mala gana me paré de la cama y vi la hora.

¿¡7:30!?
¡Tengo que bañarme!
No quiero llegar tarde.

Mi ropa ya estaba lista. Me bañé, me cambié, agarré las llaves (de mi casa y la de Kayden) y salí de mi cuarto. Vi a mis padres en la cocina.

-Voy a salir- dije.

-Pero cariño -dijo mi madre-, estoy haciendo la cena.

-Lo siento, voy tarde, regreso al rato, no me esperen, los quiero.

-Cuídate cariño.

***

Al llegar vi a la rubia y sonreí.

-Que puntual- dije.

Abrí la puerta y pasó. Pasé, cerré la puerta, caminamos hasta un cuarto de huéspedes (según Kayden, regresarían hasta las diez -aunque obviamente me iría antes-), la rubia dejó su bolsa en el piso, cerré la puerta, sonreí, me acerqué a la rubia, nos besamos, paseaba mis manos por su espalda y su trasero, de vez en cuando nos separábamos por falta de aire, caminamos hasta la cama, quité su blusa, seguí besándola, quitó mi camisa y la aventó, me acerqué, la besé, desabroche su pantalón, ella se lo quitó y lo aventó.

¿Qué esta chica avienta toda la ropa?

Me atrajo hacia ella para besarla, quité sus bragas, gimió en medio del beso, quité mi pantalón y dejé que cayera, quité mis zapatos y los de ella, paseó sus manos por mi abdomen.

>>¿Te gusta?

Mordió sus labios. Volví a besarla, la temperatura de mi cuerpo aumentaba a cada segundo, quité su bra, puso sus manos en el elástico de mi bóxer.

>>Espera, dejo me pongo el condón.

Asintió.

¿Cojeré con una muda o qué?

Me paré de la cama, abrí un cajón en donde estaban las películas, levanté las películas, vi los condones, agarré uno, me quité el bóxer, abrí el envoltorio, me puse el condón, caminé hasta la cama, la chica solo mordía su labio, la besé, la penetré, mis embestidas eran lentas, pero después fueron sin piedad (no pensaba ir lento todo el tiempo, no es como si ella me interese cómo se sienta), dejé de besarla para escucharla gritar o gemir (cualquier cosa es buena).

-Will -gemía-, sí, sigue así.

Seguía y la chica gritaba vulgaridades o gemía (sus gemidos podrían hacerte venir con tan solo escucharlo, pero no planeaba hacerlo, quería que durara un poco más).

***

Llegué a casa y estaba algo cansado.

-Hola cariño -dijo mi madre-, ¿te divertiste?

Sonreí.

-No sabes cuánto.

-Me alegro cariño, ven, vamos a cenar.

-Siento que me hayan esperado para cenar.

-No hay problema cariño.

Seamos eternos (Completa)Where stories live. Discover now