segundo

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  Durante el almuerzo solo somos nosotros, al principio comíamos en el ostenso comedor pero el profesor nunca se molestaba en presentarse y no tenia sentido siendo la cocina tan fresca, blanca y espaciosa. Tenia una isla con cinco banquetas en el cetro la cual usábamos como mesa. Las cocineras y encargadas hacían la comida, Indiana las ayudaba a cortar vegetales y hablaban animadamente sobre cualquier cosa que te puedas imaginar. Indiana era una chica muy flaca y simpatica, con brazos huesudos y piernas tan delgadas que parecía que iba a caerse, la ropa bailaba sobre su cuerpo y su cabello dorado sobre sus hombros. Era muy bonita, tenia una nariz pequeña, unas largas pestañas y sus ojos color miel brillaban igual que su labial transparente. Indiana era la sobrina del profesor, venia aquí hacia tiempo y por ende conocía a todo el personal. 

 Mars estaba sentado en la pequeña mesa en la esquina pasando canciones de the1975 junto con Matteo. Mars era robusto e inquieto, y su cabello muy oscuro y corto, no le importaba nada más que si mismo, siempre bromeaba con todo tipo de situaciones por mas delicadas que fueran y fumaba cigarrillos. Él nunca lo admitiría pero trataba de hacer de si mismo una versión mas ruda de Matty Healy, usaba chaquetas de cuero y sus mismas botas negras. A su lado, Matteo se veía aun mas vulnerable. Matteo era alguien a quien aun no lograba descifrar, era callado y miraba muchas películas de Tarantino. Tenia rulos en el cabello y pecas sobre su nariz, sus ojos eran casi verdosos y siempre parecía sentirse incomodo e inseguro, menos cuando estaba con Mars. Sonreía mucho a su lado y se relajaba. Mars hablaba sobre música reclinado en la silla con sus piernas subidas a la mesa y Matteo lo escuchaba poniendo mucha atención.

 Abrí el cajón de cubiertos y terminé de poner la mesa antes de sentarme en una de las banquetas y abrir mi libro. Indiana hablaba con Mars y Matteo cada vez que ellos decían algo a lo que ella tenia un comentario que hacer. La luz del sol iluminaba toda la cocina y las ventanas abiertas dejaban entrar la brisa del verano, junto a la larga mesada estaba la puerta trasera que daba al patio, pero en esta casa no había un "patio". Era una enorme y vieja casona en el medio del bosque y  había arboles en todas las direcciones y así seguían por kilómetros. También había un lago y a 15 minutos en la furgoneta estaba la playa. Una playa escondida entre piedras altas que estaba siempre vacía. 

 Todos nosotros estábamos aquí para pasar el verano, no todos nos conocíamos antes de esto pero todos habíamos venido por la misma razón. Nuestros padres no sabían como lidiar con nosotros, los demás no lo había dicho explicitamente pero era obvio. Hacia unos meses, había salido de fiesta y me pase con el alcohol, tuvieron que hacerme un lavado de estomago y salí viva de un coma alcohólico, pero mi madre nunca había encontrado las palabras para hablar o hacerme frente, no sabia como reprimirme o como confrontarme. Nunca se había preocupado mucho por mi y evitando cualquier tipo de problema, me envió a la casa de un viejo amigo de mi padre en el medio del bosque donde no tenia ningún contacto con nadie mas que con estos chicos.

 Indiana estaba teniendo una discusión con Mars, quien decía que la música de Selena Gomez era una basura comercial, cuando Felix entro a la cocina. Empujó la puerta con su hombro izquierdo y tenia la vista puesta en su Nikon fm2, venia de afuera y chocó con Indiana cuando caminaba sin mirar. Levantó la vista y antes de disculparse me miró a los ojos y mi corazón comenzó a latir irregularmente. 

 No habíamos hablado desde el beso de ayer en la tarde. Mi cabeza daba vueltas alrededor la idea de su presencia y cada vez que hablaba me derretía. No baje a cenar por que dije que estaba muy cansada y Indiana me había traído el café al cuarto en el desayuno por lo que tampoco lo vi en la mañana. 

-Hola Cat.

 Abrí la boca para responder pero no encontraba las palabras.

-Hola.-le dije dedicándole una sonrisa.

-Dios santo.-suspiró Indiana.

-Perdona, no te vuelvas tan loca Indi.-le dijo Felix poniéndole una mano en el hombro. 

 Felix e Indiana se conocían desde antes, Felix vive aquí por que es el hijo de Aurora, la cocinera. Habia quedado embarazada a los 16 y trabajó aquí prácticamente desde entonces. Según Indiana, el profesor y ella habían tenido una aventura hacia unos años y él se enamoró de ella. Cuando Aurora falleció el profesor le ofreció a Felix mudarse aquí con él, aunque no tenían mucho trato los dos la amaban profundamente y eso los unía. Pero no se mucho más. 

 Todos nos sentamos a comer pavo con vegetales, Felix se sentó a mi lado y hablaba animadamente con los demás. De vez en cuando su brazo rosaba el mio y no sabia si lo hacia a propósito o solo era inquieto.

-¿Saben que deberíamos hacer? Ir al lago. Llevamos aquí una semana y lo único que hemos hecho es jugar al poker.-dijo Mars jugando con su ensalada.

-Me parece una buena idea, luego podemos ir al pueblo en la furgoneta. Ahí hay un antro y le venden alcohol a menores sin ningún remordimiento.-comento Indiana.- Aunque Felix podría comprarlo legalmente.

-Para eso estoy.-dijo él y definitivamente lo sentí más cerca.

-Me convenciste con lo del alcohol, pero no soy muy de antros, ¿tu qué? ¿te gustan los antros?-dijo Mars mirándome mientras se mandaba un bocado de lechugas a a boca.

-¿Yo?

 Él asintió y se encogió de hombros diciendo que no nos conocíamos y por eso lo preguntaba.

-Si, me gusta salir de fiesta.

 Abrió sus ojos de par en par y fingió un gesto de sorpresa.

-Mírenla a la impecable señorita Catarina, leyendo en la biblioteca, estudiosa, respetuosa y presentada por el profesor como "destacada en su clase", pero quien lo diría, le gustan los antros.

 Me reí ante su comentario y negué con la cabeza. 

-Esa es la descripción que me ha escrito mi madre, pero me gusta la impecable señorita Catarina, me lo voy a quedar. Lo quiero escrito en mi lápida. 

-Trato hecho.-me respondió pícaro.

 Iba a preguntarle a Matteo su opinión acerca de los antros por que estaba muy callado como de costumbre pero Felix me interrumpió. 

-¿Qué eres entonces si no eres "la impecable señorita Catarina"?-dijo volviéndose hacia mi.

-No lo se, tendrás que averiguarlo.-dije alzando mis cejas divertida.

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⏰ Last updated: Aug 15, 2018 ⏰

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