O n e.

17 3 1
                                    

[Jeon Jungkook]
Dos años atrás...

Llevaba más de quince minutos sentado en aquella silla mirando a la nada, reprimiendo mis ganas de llorar.
Hoseok estaba bailando con una chica en la pista, Taehyung estaba suplantando al DJ y Jimin... Pues Jimin seguramente se estaba tragando a una chica en algún lugar de aquel amplio descampado.

Varias chicas habían parado en mi mesa con segundas intenciones, y aunque mi nivel de alcoholismo era lo suficientemente alto como para aceptar sus propuestas, mi mente aún estaba lo suficientemente clara para recordar aquel nombre.
Choi Yuju.

Veía a lo lejos a la pelirroja bailar con otro chico, y cada vez sentía más ardor en el cuerpo.
Si bien rabia me consumía, el sentimiento que se apoderaba de mí era el dolor.

¿Amaba a Choi Yuju? La amaba como un desquiciado.
Pero al parecer ella no a mi.
O bueno, eso deduzco yo al ver las fotos de su cuerpo desnudo sobre otro tipo en todos los teléfonos móviles de los universitarios presentes.

Así es.
Aquella mujer que tanto amaba me había engañado, decepcionado, y luego se había marchado, llevándose con ella todo mi corazón.

Pero incluso luego de ser traicionado por quien yo pensaba era el amor de mi vida, aún la amaba.
Si, mierda, si pudiera ir por ella y traerla conmigo, lo haría; lo haría incluso sin pensarlo, lo haría una y mil veces.

— Jungkook...— Levanté la mirada al notar una silueta femenina parada frente a mi.
No la conocía en lo absoluto, pero tampoco me importaba.— Hay una habitación libre adentro, y me preguntaba si querías acompaña...— Justo antes de que aquella chica terminara de hablar, un pequeño cuerpo la impactó contra el piso.

Gritos y varios golpes se escucharon y Taehyung se vio obligado a parar la música.

— Mierda.— Murmuró la ya golpeada chica antes de que Soorim -la extraña chica de intercambio- la tomara de la chaqueta y la diera contra el alambrado que rodeaba aquel gran patio.— Eres una perra.— Masculló divertida, dejándonos a todos anonadados. Soltó un par de risillas entre quejidos y fue cuando sonrío que dejó a la vista sus dientes teñidos de rojo; aquel rojo vibrante de su sangre.

— No sabes el error que acabas de cometer.— Justo cuando Soorim estaba por proporcionarle una patada en las costillas de la ya bastante lastimada chica, Jimin la atrapó entre sus brazos.— ¡Suéltame Park!— Gritó desesperada mientras pataleaba en el aire.

— Jimin...— Llamé la atención de mi amigo.— Llévatela lejos.— Luego de recibir una respuesta positiva de mi amigo, miré a la chica que se había acercado a mi hoy.— Ehm, lo siento, será otro día.— Asintió bastante shockeada por la situación y volví a darle toda mi atención a aquella chica tendida en el suelo.

La gente volvió a distenderse a lo largo del patio, Taehyung volvió a darle play a la música, y todos volvieron a sus asuntos.
Y joder, aunque eso fuera cruel cuando hay una persona lastimada, era lo mejor que todos aquellos patanes alcoholizados podían hacer.

— Oye, puedes irte si quieres.— La chica tendida en el piso llamó mi atención, hablándome con mal tono mientras limpiaba la sangre de sus labios.

— Ahora sigue la parte en la que dirás que puedes sola ¿No?— Reí leve, y le extendí mi mano.

— Metete la estúpida mano por donde no te da el sol.— Intentó pararse con ayuda de el alambrado, pero luego de unos segundos volvió a caer al suelo.

— Vamos ya, mujer.— La tomé entre mis brazos.

— Me duele mucho la cabeza.— Susurró con pesadez mientras caminábamos en dirección a mi auto.

— Te llevaré al hospital, allí te atend...— Me interrumpió.

— ¡No! ¡Ni se te ocurra!— Me asusté, y casi cae de mis brazos.— Yah inútil ¿No sabes cómo cargar a una mujer?— Se quejó.

— Por supuesto que si... Solo me asustaste.— Fortalecí el agarre, sintiendo en nosotros la mirada de todos los presentes por los que pasábamos.— ¿Por qué no quieres ir al hospital?— Solté con indiferencia pero muriéndome de curiosidad.

— ¿Y si mejor te metes en tus asuntos?— Suspiró.

— Tienes razón, no eres mi asunto; pero te estoy llevando en brazos y manchando mi camisa favorita con tu sangre.— Rió y enseguida se quejó por el dolor en su abdomen; al parecer aquella chica si le había dado una buena paliza.— ¿Que tal de tu hogar? ¿Puedo llevarte ahí?

— Pues estaría agradecida si lo hicieras, pero lamentablemente no se puede.— Llegamos al auto, y con cuidado la senté en el asiento del copiloto.— Vaya, camaro.

— ¿Que tengo que hacer contigo?— Me miró.

— Pues hace unos minutos te dije que me dejarás ahí.— Señaló el patio desde una ventanilla.— Mira chico, no vivo aquí, y esa maldita perra rubia rompió el vehículo de mis papás.— Soltó con rabia mientras se recostaba en el asiento.

— Vaya, parece que alguien tendrá problemas con mamá y papá.

— Ay jódete ¿Quieres?— Sin decir nada abrió la puerta.

— ¿Que haces?— Tomé su brazo y la volví a sentar.— Oye se que somos completos desconocidos, pero no puedo dejarte así en la calle a estas horas de la madrugada.

— Oh ¿No? ¿Que te hace creer eso?— Rió.— Mírame, no siento mis costillas, y creo que me estoy tragando toda mi sangre, pero aún así no ando llorando por ahí. Deja de querer salvar a todos, no eres puto miembro de Unicef, y no quiero tu ayuda ¿Que te hace pensar que no puedo sola?— Se soltó con brusquedad de mi agarre y bajó del auto, cerrando la puerta de una patada.

No dio más de tres pasos cuando su cuerpo cayó con mucha fuerza al cemento; la chica se había desmayado en plena calle.

Genial Jungkook.
Mi vida era un fracaso y ahora cargaba con una desconocida, desmayada, golpeada y sin hogar en el asiento trasero de mi auto.

Mi vida era un fracaso y ahora cargaba con una desconocida, desmayada, golpeada y sin hogar en el asiento trasero de mi auto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 03, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Love Maze ➳ Jeon Jungkook Donde viven las historias. Descúbrelo ahora