A gift just for you

A pesar de que el padre de ella era el héroe más aterrador sobre la faz del planeta Tierra, sus intenciones para salir con ella eran serias.

Y eso ya era mucho que decir.

¡Es un hombre joven y libre!

Podría pasarse la vida tonteando con chicas guapas —cosa que hacía pero ya no— e impresionándolas con su atractivo natural y fuerza... y habilidad.

Pero no es así. No desde ese momento.

Ese único momento en que realmente se sintió volar. El momento en que la conoció.

No puede decir que fue a primera vista, que puede ser un casi, sino que cuando la conoció realmente.

Ahí, con su hermano menor. Ahí, en la cocina. Ahí, sonriendo cortésmente a pesar de la cara de muerte de su padre contrastando, cuando fue a visitar por segunda vez a su ídolo en su hogar.

No fue una de sus mejores ideas pero al ver que aún seguía vivo luego de cruzar el umbral de la puerta, simplemente dejó que las cosas pasaran.

Y pasó.

Y no fue como él esperaba.

La costumbre era que él hacía acto de presencia y las chicas caían rendidas a sus pies. Sabía que no siempre iba a ser así, pues las mujeres comprometidas no caían tan fácil, pero ella era distinta.

Muy distinta.

No se parecía en nada a su padre tanto en apariencia como en carácter: es muy amable —con él— y cariñosa, un poco tímida pero no exagerado, atenta y muy culta y habilidosa.

Y cocinaba como una diosa.

—Me llamo Fuyumi Todoroki, un gusto.—Se presentó cuando Hawks ya se retiraba de su hogar porque Enji ya no le soportaba tenerlo cerca.— Disculpe a mi padre, suele ser algo intenso pero no es siempre así de grosero.

—Nah, está bien. —Le restó importancia, haciendo un gesto con la mano.— Yo soy Hawks y, aún que no lo creas, somos muy amigos.

Se atrevió a brindar a pesar de que aún seguía en la mira del héroe pelirrojo.

Pero así comenzaron las cosas.

Bromas y bromas por parte de Hawks y uno que otro gruñido por parte del dueño de casa y risitas tímidas de Fuyumi hasta que el tiempo pasó, y ya no sólo eran cenas improvisadas sino que de vez en tanto la invitaba a salir.

Claro que sin el conocimiento de Endeavor.

Aún quiere vivir.

Hawks siempre trataba de llevarla a sitios privados y poco concurridos pero al ser una figura reconocida y de apariencia muy llamativa, sus citas siempre se veían interrumpidas por fans suyos.

Al principio, Fuyumi se hacía a un lado y esperaba a que Hawks terminara de hablar con ellos, coquetear con una que otra chica, sacarse fotos y regalarle a todos una deslumbrante sonrisa; pero luego de la quinta vez su corazón comenzó a sentirse pesado.

—¿Siempre le sonríes así a todas? —Preguntó con cierta molestia, Hawks lo notó de inmediato pero la sonrisa que le dio fue más suave.

—Sí, pero para tí no sólo hay una sonrisa. —Le habló con suavidad, un poco nervioso también. Tomó la mano de ella y la colocó en su pecho, lo que le hizo notar los acelerados latidos de él.— Es lo que siento cada vez que estoy contigo... —Comenzó a sentir el calor subirle por el rostro, pero no sé echaría atrás. No ahora.— Sé que puede sonar algo cursi... Pero éste es un regalo que es sólo para tí.

Y no lo pudo evitar. Como miel, sus palabras endulzaron todos sus sentidos y, aunque sabía que no debía de dejarse llevar por sólo palabras —porque su padre se lo recordaba a diario—, Fuyumi ya no se podía sentir más atrapada por él en esos momentos.

Bajó la mirada, intentando ocultar su rostro, pues sentía el calor hasta por las orejas, y asintió.

La verdad es que ni ella sabía qué decir por lo que sólo atinó a responder con un "gracias" y continuar en silencio sin ser capaz de apartar la mano del pecho del otro chico, quien parecía que sufriría un ataque cardíaco en cualquier momento.

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Notas de la autora:

Espero me haya quedado bien Ooc porque sacar a relucir mi lado cómico dejaría esto en un completo desastre xD

Bueno, amé la shipp esta más que la de Endeavor x Hawks. Me encanta pero amé más esta 💕

Espero escribir algo más de ellos en un futuro, con menos Ooc eso sí, me encantan!!!

Nos leemos~ 😘💕