Solo amigos (imagina de Fred Weasley)

Olvidada

Hacía un tiempo que Harry había venido al cuartel que ya casi estaba como nuevo. Hermione y Ron eran los nuevos perfectos de Gryffindor.

Quedaban dos días para el curso lo que significaba que había llegado le hora. Tus padres te iban a olvidar y sabias que era lo mejor.

-Vamos Ali- la voz de Fred sonó de fondo en tus pensamientos.

-Ha llegado la hora Alice- te estaba hablando el Señor Weasley y no te dabas cuenta- ¿éstas segura?

-Totalmente, puede ser duro pero lo superare- sabias que todo volvería en un tiempo a la normalidad pero era duro.

-Les haremos un hechizo desmemorizador y creerán que se apellidan y llaman de otra forma, que nunca tuvieron una hija y que van a vivir en Francia- explicó Moody

-Vale... - <que nunca tuvieron una hija> esas palabras resonaban dentro de ti.

-Tranquila Ali, todo se va a solucionar, volverás a ver a tus padres y te recordarán- dijo Fred intentando animarte.

Estabais en la puerta de tu casa y con un simple hechizo abristeis la puerta. Al entrar tus padres estaban durmiendo ya que era tarde.

-Obliviate -susurró el señor Weasley.

Una nube blanca entró en la varita, sus recuerdos, saliste de la habitación y fuiste a ver tu cuarto por última vez, al entrar no quedaba rastro algo que se relacionara contigo, ni fotos ni posters, solo ropa que te llevaste.

Al recogerla volviste al cuartel y fuisteis a guardar la ropa.

-Ali... No llores- no te estabas dando cuenta de que las lágrimas caían por tus ojo- se va a arreglar todo, George y yo estarlo siempre contigo y mi madre te quiere como una hija más. Durante este tiempo da por hecho que eres una de la familia.

-Ya lo se Fred, pero es duro, mis padres no saben ni que existo- tus palabras fueron eclipsadas por tus sollozos.

-Ahora, no te preocupes por eso, piensa que gracias a ti ahora están a salvo.

-Tienes razón Fred prefiero pensar eso.

-Ahora tranquilizate y no llores- dijo Fred mientras te ayudaba a colocar la ropa, y tú a sentiste.

-Gracias Fred, no se que haría sin ti- dejaste de colocar la ropa para mirarlo a los ojos.

-Ni yo sin ti pequeñaja- susurró Fred para después besarte.

Los dos días siguientes te notabas un poquito más animada y por fin había llegado el día de volver a Hogwarts.

Moody y el resto nos habían escoltado hacia el andén y por fin estabais en la tranquilidad del expreso.

-Por fin vuelta a casa- dijiste mirando por la ventana.

-Ya lo echaba de menos- dijo George.

-Y yo, pero con todo lo que esta pasando ya nada es un sitio seguro... - dijo Fred

-No seas así Fred, de momento vamos a disfrutar de nuestro último año en Hogwarts- dijiste para animar el ambiente.

-Tienes razón en un año ya estaremos preparando nuestra tienda de artículos de broma- recordó Fred más animado.

-Si, imaginaroslo nosotros tres trabajando en el lugar que soñabamos cuando éramos pequeños- añadiste risueña.

-Y todo gracias a Harry, le debemos una grande- añadió George.

-Tienes razón, mira a Ron el prefecto- dijo Fred.

-¡Eh! Prefecto ¿qué tal lo llevas?- te burlaste.

-Muy graciosa Ali, lo llevo genial- dijo enfadado.

-Cuidado Ali no nos vaya a castigar- bromeó George.

-Eso eso ahora tenemos que tener cuidado con las bromas- dijo Fred como si estuviese asustado.

-Me voy- Ron cerró la puesta y se fué.

-Como se lo cuente a vuestra madre estamos los tres muertos... - dijiste riendo.

-Un riesgo que hay que correr- explicó George.

Todo el viaje lo pasaste riendo con los gemelos, comiendo dulces del carrito y hablando de la futura tienda de los gemelos.

Por fin llegateis a Hogwarts y se presentaron los nuevos profesores entre ellos una mujer bajita y regordeta vestida totalmente de rosa.

-No me da buena espina lo que dice- susurró Fred.

-Creo que el Ministerio esta interfiriendo en Hogwarts.

-Quieren echar a Dumbledore- corroboró George.

-Exacto, pero no lo lograran tan rápido- aseguraste.

-Solo nos toca hacer una cosa... Esperar- añadió Fred.

A la mañana siguiente ya estabais preparados para conocer a la nueva profesora de Defensa contra las Artes oscuras.

La clase no podía haber sido peor, ni usabais magia ni aprendiais hechizos, solo había que leer un estúpido libro más antiguo que la profesora.

-Vaya asco de profesora- se quejó Fred

-Si, ni hechizos vamos a usar, solo leer un mugriento libro de "Defensa contra las Artes oscuras"- dijiste imitando la voz de Umbridge.

-¿Qué se habrá creído la cara sapo?-protestó George.

-Se merece una broma...

-Fred hay que tener cuidado, la ha mandado el Ministerio y eso le otorga gran poder.

-Si pero Dumbledore aquí es el que manda no ella- te contrarió George.

-Si pero no por mucho, harán lo imposible por detenerlo, a el ya Harry.