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Para empezar la mañana bien, llegaba tarde a clase.
Me senté sin llamar mucho la atención al lado de Felix y el me miró. Le dirigí una sonrisa y el me la devolvió.
Saqué mis libros y comencé a prestar atención a la clase, hasta que llegó un punto en el que me era demasiado aburrida, miré a Felix y el estaba igual que yo, la diferencia era que el parecía estarlo desde hace bastante, ya que le había dado tiempo a dibujar a una familia felíz con un perro.

Entonces me acordé y saque la sudadera que su amigo, el mangas cortas, me presto el otro día.

- Lix - susurré y el se volteó hacia mí - ten, dile a tu amigo que muchas gracias.

Felix me miró extrañado y entonces pareció recordar.

- Ah... Ya, vale - cogió la sudadera y la apretujo hacia él para hacerla más pequeña - Dijo que te la podías quedar.

- Ya, pero hacia sentir culpable. Es suya.

- Huele a ti, seguro le encanta.

Eso me hizo quedarme algo extrañada pero volví a lo mío y Felix guardó la sudadera.

Cuando tocó el timbre Lix y yo salimos de clase conversando.
Yo no tenía tenía clase la siguiente hora asi que le pregunte si el tenía clase, a lo que me contestó que si.
Nos despedimos y decidí ir al campus y terminar el trabajo que estaba haciendo con el laptop, aunque esta vez me aseguraría de guardarlo para no repetir lo del otro día.

El clima era bueno a pesar de que el frío estaba presente, aunque en el sol se estaba muy bien. A lo lejos vi a alguien qué me sonaba de algo y resultó ser el amigo de Felix, me quedé observandolo sentada desde la lejanía, el no se dio cuenta y pasó al centro, me preguntaba que haría aquí ¿tal vez venía a traerle algo a Felix?
Quise darle al menos las gracias por lo del otro día pero nisiquiera me moví. Parecía que me había quedado paralizada.

-¿No tienes clases?

Me giré algo sorprendía y vi a Minho con una sonrisa de oreja a oreja, le contesté sonriendo y saliendo de la parálisis mientras que el se sentaba a mi lado.

- Yo tampoco - dijo mientras sacaba una galleta - ¿quieres?

Negué la cabeza y guardé el laptop.

- Minho... ¿Sabes del nuevo amigo de Felix?

No se dé dónde saqué tanto interés y ni tanto valor para decirle eso tan directa.

- ¿El nuevo amigo? - me pregunto fundiendo el ceño - Quizas te refieres a Bang Chan.

- No lo sé, posiblemente.

- Sí, seguro será el. ¿Por qué? ¿Te gusta? - me preguntó haciéndome ojitos, cosa a la que no supe reaccionar ya que su cara era muy graciosa, pero no debía reírme ya que sino, pensaría que me gustaba ese tal Bang Chan.

- Para nada, apenas lo conozco, es sólo que el otro día me dejo una sudadera porque tenía frío y ahora lo vi entrar ahí.

Minho me observó y de repente hizo una mueca algo extraña.

- ¿Aquí? Tal vez vaya a estudiar... Le preguntaré después a Felix.

Justamente tocó el timbre y me despedí de Minho.
Me dirigía a mi clase, la cual no compartía esta vez con Felix, lo que me iba a resultar el doble de aburrida.
Me puse a pensar en mi conversación con Minho, conocíamos a todos los amigos de Lix, por lo cual el chico al que se refería Minho sería el mismo al que me refería yo.
Así que Bang Chan...

Ese chico tenía algo extraño que hacía que me resultase bastante misterioso e interesante, y me estaba comenzando a hacer mal.

Mi garganta estaba seca y no paraba de toser, por lo que mi profesor me dijo que vaya a tomar agua al baño, y así lo hice.
Salí de la clase y me dirigí al baño, cuando salí de el, iba a pasar un pasillo cuando choque con algo o alguien y su carpeta cayó.
Rápidamente lo cogí del suelo y pedí como unas 5 veces disculpas en menos de 3 segundos.
Cuando levante la vista pude encontrarme con la persona menos esperada.

- Gracias, y tranquila. - me dijo sonriendo.

La persona que había conseguido que me gustase alguien por más de dos años.
Hwang Hyunjin.
Pude notar como mi nerviosismo se podia palmar y mis mejillas tomaban un color más rosa de lo normal.

- Lo siento, iba distraída... - fue lo único que alcancé a decir.

- No pasa nada - me dijo riendo - nos vemos luego.- y acto seguido se marchó.

Me quedé en el sitio como unos 3 minutos sin hacer ni decir nada simplemente con una estúpida sonrisa. Parecía que tenía 15 años.

Decidí volver a clase, ahora si más contenta que nunca y antes de llegar me topé de cara con otra persona.
Demasiadas emociones juntas.

Era el supuesto Bang Chan.
Pareció reconocerme y me sonrió algo tímido. Algo en mi interior se activó pero no sabía siquiera expresar que era.

- Hola. - me dijo el.

- Hola. - le contesté con la misma sonrisa - por cierto, muchas gracias por lo del otro día, ya le he dado la sudadera a Felix.

- Oh, no es nada. - se rasco la nuca - y no tenías porque, podías quedartela.

- Ya pero me daba cosa, es tuya. - el asintió y miro hacía la ventana, era un momento algo extraño que no sabía cómo definir - bueno, tengo clase... ¡Ya nos veremos! - le dije comenzando a caminar.

-Si... Hasta luego -respondió el- ¡Por cierto! Me llamo Bang Chan.

Una sonrisa algo tonta, que no sabía si aparecía por Bang Chan o por lo sucedido antes con Hyunjin, se apoderó de mi.

- Alysa, encantada. - le conteste mientras me despedía con la mano para llegar a clase.

-Jan.

Hoodie | Bang Chan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora