Scott se encontraba sentado en el porsche de su casa, cuando Allison apareció. Le había mandado un mensaje diciéndole que tenia que verlo, una sonrisa apareció en su rostro mientras se levantaba su encuentro.
Luego de todos los sucesos de hace unos días, de Lydia aun intentando reponerse, de Stiles intentando consolarla y de Jackson aun desaparecido, necesitaba algo de paz en su mente.
Chris el padre de Allison había logrado convencer a los policías de que Jason había fingido su muerte y que estaba con un desequilibrio mental que le había llevado a creer que Lydia había causado el accidente.
También se le culpo de todas las muertes que hubieron en el pueblo desde su muerte, solo que eso no era del todo cierto y ni siquiera el padre de Allison sabia toda la verdad.
La verdad era que Peter había logrado convencer a Jason de que Lydia merecía morir, y no sabían cual era su plan, solo sabia que haría todo lo necesario para proteger a todos los que quería.
Pero ahora, solo necesitaba algo de paz.
Allison era esa paz, desde que la conoció, sabia que algo dentro de el había cambiado.Dicen que el primer amor suele hacer eso, llenar tu alma de esa sensación de paz y tu estomago de mariposas revoloteando. Más que mariposas el sentía que tenia fuegos artificiales en su interior.
Acaricio su mejilla cundo llego a su lado y la beso, suavemente, recreándose con la contextura de sus labios, la suavidad de estos. Inspiro llevando su aroma a sus pulmones. Rosas. Allison siempre olía a rosas.
-Te extrañe-dijo este cuando se separaron, sus brazos rodeando la esbelta cintura de Allison.
-Yo también lo hice-le respondió ella, acariciando ausentemente su mejilla.
Sus ojos apagados le hicieron darse cuenta a Scott de que algo malo sucedía. Comúnmente los ojos de Allison siempre estaban iluminados, eran como dos estrellas en la noche.
-¿Qué sucede Allison?-pregunto este preocupado, quizás sus padres habían decidido irse del pueblo, o quizás habían descubierto algo sobre la muerte de Kate…
-¿Recuerdas….?-comenzó ella vacilante, mientras apretaba los labios, rehusándose a decir lo que quería decir-¿recuerdas cuando te dije que mi mayor miedo era que al descubrir quien era… salieras corriendo?
Scott asintió, iba a responderle cuando escucho un ruido detrás de ellos, girándose miro alrededor, frunciendo el ceño, no había nada.
-Lo siento mucho-dijo Allison a sus espaldas, Scott se giro frunciendo el ceño y cuando iba a preguntarle el porque, sintió un golpe en el pecho. Apenas pudo ver a Allison sosteniendo el teaser en su mano, o como una figura se acercaba a ella mientras caía al suelo.
El sentimiento de traición ardió en sus intestinos, y por primera vez, se permitió caer en la oscuridad del dolor.
-Cada uno a comenzado a caer-Chris se detuvo junto a su hija, mientras ambos veían a Scott caer en la inconsciencia- así se hace, hija.
………..
La puerta de los Martin sonó, y Lydia escucho unos fuertes gritos debajo. Frunciendo el ceño bajo las escaleras de dos en dos, y se encontró con algo que no esperaba.
El doctor Cordero junto a dos hombres vestidos de blanco estaban abajo, parecía estar discutiendo con sus padres. No habia visto al doctor desde que habia sido dada de alta de Eichen House y se pregunto el que estaria haciendo alli.
-¿Qué sucede?-pregunto frunciendo el ceño mientras miraba a sus padres, ambos le apartaban la mirada y eso hizo que un frio se colara en su pecho.
-Lydia, tienes que acompañarnos-dijo el Doctor Cordero
-No-ella retrocedió, sus ojos agrandándose con el terror mientras la idea de volver a esas frías paredes se incrustaba en su mente-¡Aléjense de mi!
Ella retrocedió, casi trastabillando cuando sintió a uno de ellos tomarla del brazo
-¡Suéltenme!-grito sacudiéndose-¡Mama! ¡Papa!
-Todo estará bien cariño-dijo su madre, sus ojos inundados en lagrimas, aun así Lydia no dejo de luchar contra los dos médicos que mantenían un fierro agarre sobre sus brazos.
-Sédenla-dijo el doctor Cordero, severamente, mirándola fijamente.
-¡No!-grito, sintió un leve pinchazo en el brazo, y todo fue sumiéndose en una lúgubre oscuridad, hasta que finalmente cayó en la inconsciencia.
………
Stiles se encontraba conduciendo en su jeep hacia la casa de Lydia, le había dicho que iría esa noche debido a que sus padres saldrían y ella no quería quedarse sola.
Incluso había llevado unas películas para poder ver, cuando algo hizo que se detuviera. Un cuerpo en medio de la calle, bajándose del coche camino hasta este frunciendo el ceño. Al acercarse reconoció de quien se trataba.
-¿Jackson?-pregunto al reconocerlo, este se encontraba tendido, moratones en su rostro-Pero que…
Algo le retuvo el brazo, sacudiéndose se giro para ver a unas figuras abalanzarse sobre el, apenas pudo gritar cuando fue lanzado al suelo y golpes fueron lanzados hacia su rostro y cuerpo.
Su cabeza choco contra el pavimento y podía oler la sangre brotar en el viento, mientras su vista se volvía nebulosa y sus pensamientos lentamente se deshacían en hilos invisibles, aunque solo pudo recordar uno: Lydia.
……….
-¿Qué haremos ahora?-le pregunto Allison a su padre mientras veía a uno de los cazadores atar a Scott a la valla-Digo, ¿Por qué a todos? Pensé que iríamos solo detrás de los hombres lobos pero…
-Venganza, Allison-le respondió su madre desde su posición- lo sabes, es hora de que ellos paguen por lo que le hicieron a Kate…uno por uno.
Ella asintió
-Lo se…
……….
Lydia abrió los ojos mientras apoyaba su cabeza contra la fría pared, su cabeza le dolía y le latía. No gruño por el dolor y su mirada se detuvo frente al reloj a unos metros de distancia de ella.
08:59
Su vista se disperso por el resto de la habitación, silenciosa y reducida. Tan blanca como la recordaba y ese olor a hospital que intoxicaba su olfato.
El frió se coló por su cuerpo, pero no se lo permitió entrar. Sus peores pesadillas habían tomado forma, pero ya no era la chica que había sido, sobreviviría, siempre lo hacia.
Lo haría para poder regresar a sus amigos…a Stiles.
Lydia deslizo su mirada desde el punto de la esquina, hasta posarla sobre el reloj de la pared.
09:00
Silencio.
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Lucha | Teen Wolf #2|
FanfictionSi no eres valiente para luchar... No te enamores Scott McCall ha tenido su porción de sobrenatural cuando una noche, mientras estaba con su mejor amigo, es atacado por un hombre lobo y convertido en uno. Ahora, tendrá que lidiar no solo con su nuev...